"Yo fabriqué esta prenda de Zara que vas a comprar pero no me pagaron por ello"

Los clientes de las tiendas de Zara en Estambul se han llevado a sus casas un 2x1, aunque sin saberlo. El contenido a mayores de la prenda estaba tan estratégicamente situado que ni siquiera se dieron cuenta en el momento de probarse la ropa. Solo cuando hurgaron en los bolsillos de la chaqueta o en el pliegue de los vaqueros de la firma de Inditex se toparon con la sorpresa.

"Yo fabriqué esta prenda de Zara que vas a comprar pero no me pagaron por ello". Este mensaje incluido en una etiqueta estaba escondido adrede en las prendas, y es obra de los empleados de Zara en solidaridad con los trabajadores de Bravo, una fábrica turca subcontratada por Inditex, Next y Mango que quebró en 2016 dejando a 140 familias en la calle con salarios pendientes.

Bravo era proveedora de las empresas españolas y ahora sus empleados reclaman 650.000 euros de compensación a las compañías tras vivir un auténtico infierno, tal y como relatan a La Información: "Hace más de un año y medio nuestro jefe se negó a pagar los últimos tres salarios que nos correspondían y desapareció. Los acreedores llegaron a nuestra fábrica y se apoderaron de todas las máquinas y objetos de valor. Nos quedamos sin nada y aún no hemos cobrado ni un euro de nuestros sueldos ni ningún tipo de compensación por despido", explican.

Por Diego Caldentey

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Según aseguran portavoces de Inditex, se les ha hecho una oferta en concepto de "fondo compensatorio", pero esta no ha sido aceptada por unos trabajadores que han encontrado el apoyo internacional.

El primero llegó de la mano de las redes sociales con el hashtag #BravoIscileriIcinAdalet (Justicia para los trabajadores de Bravo), y el segundo con una petición en la plataforma Change.org en busca de 300.000 firmas para decirle a Zara, Next y Mango "¡pagad a vuestros trabajadores los salarios que ganaron!".

Hace tan solo cinco días ya acumulaban 200.000 firmas, y ahora suman 281.000 restando solo 19.000 para llegar al objetivo fijado en el momento de lanzar la petición.

"Hay una responsabilidad civil y moral que afecta a toda la cadena productiva, de la que deben hacerse cargo ellos también". Estas son las palabras a La Información de Eva Kreisler, portavoz del colectivo 'Clean Garment Campaign' ('Campaña Ropa Limpia'), una plataforma internacional en defensa de los trabajadores de la industria de la confección que lleva el caso.

Los representantes de esta plataforma aseguran que Inditex, Next y Mango tienen una "responsabilidad ética y moral" porque la subcontrata trabajaba en exclusividad para ellas.

Por su parte, Inditex afirma haber cumplido con "todas sus obligaciones contractuales" con Bravo y espera "encontrar una solución rápida para todos los afectados".

Por el momento el acuerdo parece lejano y las familias siguen haciendo fuerza con el respaldo de desconocidos que tampoco entienden su situación y llaman al boicot a Zara.

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