Cuando pisaron la libertad en el aeropuerto Vanguardia de Villavicencio, los 10 liberados ya no llevaban cadenas colgando del cuello como durante su cautiverio.
Ahora, Luis Alfonso Beltrán, Luis Arcia, Róbinson Salcedo, Luis Moreno, César Lasso, Wilson Rojas, Carlos Duarte, Jorge Romero, Jorge Trujillo y José Forero ya son libres y tendrán que aprender a revivir una vida que dejaron atrás hace más de una década.
Luis Alfredo Moreno
Cuando fue secuestrado Moreno tenía 29 años y era cabo primero. Ahora es sargento. Cayó en las garras de las FARC en 1998, durante un ataque a una base de Miraflores.
Desde entonces su madre, María de Moreno, se convirtió en una caminante por la paz en la lucha por la liberación de todos los secuestrados, tal y como cuenta el diario colombiano El Espectador. Durante su cautiverio, el sargento Moreno dedicó muchos ratos libres a bordar y escribir, según relatan sus compañeros.
Jorge Trujillo
La persona que probablemente más ha sentido la ausencia del intendente ha sido su hija, Gloria Sofía de 12 años. Cuando encerraron a su padre en la selva era tan sólo una recién nacida. Fue secuestrado durante un brutal ataque a una comisaría de Puerto Rico el 11 de julio de 1999.
Sus pruebas de vida dieron testimonio de varios cálculos renales e infecciones cutáneas durante el cautiverio. En honor a él, su hermana Patricia se unió a la Policía para luchar por la paz.
Carlos José Duarte
Carlos Andrés tenía nueve meses cuando las FARC le arrancaron a su padre el 11 de julio de 1999. Ahora, con trece, cuenta al Espectador que su padre se perdió sus primeras clases de guitarra.
Deportista de 41 años, José Duarte tampoco había tenido hasta ahora la oportunidad de ejercer de abuelo de su primera nieta: Ana María, que ahora tiene tres añitos.
Jorge Humberto Romero
Su nieta estaba en primera fila esperando su llegada. Romero, que llevaba 12 años de cautiverio desde aquel ataque en Puerto Rico, también tendrá la oportunidad de recuperar el tiempo perdido con su hijo.
Romero fue secuestrado también durante el ataque a Puerto Rico. El subintendente había servido como efectivo en Villavicencio, el mismo lugar que ha dado la bienvenida a su libertad.
Wilson Rojas Medina
Desde su captura, el más joven entre los rehenes se ha convertido en tío más de cinco veces: le han nacido cinco sobrinos, dos hijos de su hermano Freddy y tres de su hermano Antonio.
Con 36 años y una hija de trece, el intendente Wilson Rojas se ha mantenido siempre con "las esperanzas de volver" desde aquel fatídico 11 de julio de 1999 en el que se lo tragó la selva.
José Libardo Forero
Forero trató de escapar junto a Jorge Trujillo en 2009, pero la crueldad de la guerrilla los devolvió al corazón de la selva. Su secuestro ya sumaba entonces más de diez años. Ayer volvió a casa junto con un pecarí (una especie de pequeño jabalí silvestre).
Su hijo Libardo que no había cumplido todavía los ocho años, tiene ahora 20 y estudia Filología. Su hija Norma, tiene 16 y aún está en bachillerato.
Mañana, Él y su esposa por fin podrán celebrar una fecha especial juntos: sus 20 años de casados, según narra El Espectador.
César Augusto Lasso
Lasso es ahora un policía veterano de 45 años. Este sargento primero fue secuestrado el 1 de noviembre de 1998 en Vaupés, cerca de la frontera con Brasil.
Además de sus sobrinos y hermanos, a Lasso lo esperaban su madre, Fabiola Monsalve, su esposa y tres hijos. Hasta ahora, el sargento no había tenido la oportunidad de conocer al menor.
Luis Arturo Arcia
Uno de los peores golpes que vivió Arcia en el secuestro fue la noticia de la muerte de su madre adoptiva Eliana Avellaneda, como cuenta El Espectador.
El sargento viceprimero fue atrapado durante el asalto del 3 de marzo de 1998 en Caquetá en el que murieron más de 65 militares.
Robinson Salcedo Guarín
Cuando Salcedo dejó de ver a su familia ni siquiera tenía sobrinos. Ahora tiene 18 miembros nuevos en la familia, como cuenta El Espectador.
Fue secuestrado el 3 de agosto de 1998 en Miraflores. Más de diez años después le seguían llamando "El Mechudo", porque hizo la promesa de no cortarse el pelo hasta que las FARC lo liberasen. Desde ayer se ha quedado sin apodo.
Luis Alfonso Beltrán
Fue el primero en bajar del helicóptero para pisar la libertad. El rehén más antiguo no dejó ni mujer ni hijos tras su secuestro. Había cumplido ya 14 años de cautiverio desde aquel 3 de marzo de 1998 en el asalto al Billar.
Desde entonces han muerto 13 de sus familiares, entre ellos su abuela materna, y dos sus hermanas, Doris y Gloria, según narra el diario colombiano.
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