Se cumplen 10 años de un incendio que dejó más de 600 víctimas en Lima

Lima, 29 dic.- Los peruanos recuerdan hoy diez años del gigantesco incendio que se desató en la popular zona comercial de Mesa Redonda, en el centro histórico de Lima, que dejó más de 600 víctimas, entre fallecidos, heridos y desaparecidos.

Los familiares de las víctimas denunciaron hoy que, a pesar del paso del tiempo, aún no han recibido las indemnizaciones ordenadas al finalizar el proceso que se siguió para determinar a los responsables del siniestro, que se originó por la explosión de pirotécnicos.

Un tribunal peruano condenó en octubre del 2007 a cuatro años de prisión efectiva a un exjefe policial y a cinco comerciantes, y también sentenció a otros once comerciantes a penas de tres y cuatro años de prisión suspendida (sin ingresar a la cárcel).

El dictamen consideró culpable de los delitos de homicidio culposo agravado y lesiones culposas graves al general retirado de la Policía Nacional Luis Sánchez Arias, quien fue responsabilizado de ordenar el retiro de la vigilancia de seguridad en la zona donde se produjo el incendio.

Además, condenó por los mismos delitos a los comerciantes de objetos pirotécnicos Lucila Pretell Torres, Sonia Lara Ayala, Domitila Tapara Quispe, Clara Luz Brocca y Carlos Lujan Valderrama.

El tribunal ordenó que los sentenciados paguen de manera solidaria 200.000 nuevos soles (unos 63.490 dólares) a los deudos de cada una de las víctimas mortales, así como 30.000 soles (cerca de 10.000 dólares) a cada persona que resultó herida.

Sin embargo, los familiares denunciaron hoy que no han recibido ninguna compensación económica y consideraron "absurda" una nueva sentencia, que ordenó que los responsables paguen 700 soles (259 dólares) a cada uno de los afectados.

"¿Eso cuesta la vida de los fallecidos de Mesa Redonda"?, se preguntó Martha de la Cruz, la presidenta de la Asociación de Damnificados 29 de diciembre 2001, en declaraciones a la emisora Radio Programas del Perú (RPP).

De la Cruz, que perdió a su hermana y a su sobrina en el incendio, reveló que sufrió quemaduras que le han obligado a someterse a ocho operaciones y mantiene lesiones que aún le causan fuertes dolores.

La representante también señaló que tanto el general retirado como los importadores de pirotécnicos que fueron sentenciados salieron en libertad tras pasar dos años en prisión gracias a una buena conducta.

El abogado defensor de los deudos, Oscar Schiappa-Pietra, informó, por su parte, que ante la falta de una respuesta satisfactoria a sus reclamaciones, los afectados acudirán ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Schiappa-Pietra dijo a los periodistas que espera que el Gobierno peruano reaccione ante la demanda, he insto al ministro de Justicia, Juan Jiménez, a reunirse con las víctimas del incendio.

El siniestro se produjo la noche del 29 de diciembre de 2001 en cuatro manzanas colindantes a la zona del centro histórico de Lima, conocidas como Mesa Redonda, y fue sofocado tras más de diez horas de trabajo por más de 1.000 bomberos y voluntarios.

Aunque nunca se ha establecido un saldo definitivo de víctimas, dada la magnitud y la destrucción que causó la tragedia, el último registro oficial indica que murieron 277 personas, 189 desaparecieron, 45 resultaron asfixiadas y 137 quemadas. También se reportaron más de diez millones de dólares en pérdidas.

Al cumplirse la primera década de la tragedia, los familiares informaron que enviarán un pronunciamiento a las autoridades del Ejecutivo y luego asistirán a una misa que se celebrará en la Catedral de Lima.