Tres yazidíes narran su pesadilla bajo el 'EI': "Nos violaron hasta cinco veces al día"

Fueron violadas sistemáticamente por los militantes del Estado Islámico. Sus familias fueron asesinadas o siguen desaparecidas. Los terroristas, cuando capturaron su pueblo, elegían a las más jóvenes para violarlas. Cuando un militante del grupo terrorista se cansaba de ella, vendían a la chica de la que abusaba a otra persona. Compañeras suyas se suicidaron. Si intentaban escapar, eran torturadas y violadas por grupos de hombres.

Son las historias de Noor, Bushra y Munira, tres jóvenes yazidíes que han contado su historia a la BBC, y que han narrado el horror de vivir bajo el califato del autodenominado Estado Islámico. Un Estado Islámico que ha autoproclamado su califato en Siria e Irak, y que impone su ley en la región. Los yazidíes han sido uno de los objetivos del grupo terrorista, dado que los terroristas les consideran "adoradores del diablo".

Su historia del terror comenzó cuando el grupo terrorista atacó su pueblo, en Irak, "una noche, atacaron dos pueblos vecinos. Hubo combates hasta las seis de la mañana. Nuestros familiares en el pueblo cercano nos dijeron que nos fuéramos porque no había soldadospeshmerga, solo hombres yazidíes. Pero lospeshmerga de nuestro pueblo nos dijeron que nos quedáramos y que no nos preocupáramos porque ellos nos defenderían", recoge el medio.

No fueron suficientes. Después de eso, terror. Los terroristas entraron en el pueblo, habiendo vencido a los peshmerga. Entraron y separaron a los hombres de las mujeres y los niños, "se los llevaron y les dispararon". "Yo tengo siete hermanos, uno de ellos consiguió escapar. Los otros seis todavía están desaparecidos. A mi madre se la llevaron junto a otras 70 mujeres mayores. Vimos un excavadora y oímos tiros", asegura Noor.

Los militantes recogían entonces a las chicas, como narra Munira, otra de las chicas: "Los comandantes de EI tienen entre 50 y 70 años. Yo tenía 15 años cuando fui escogida por un comandante. Dijo que las chicas menores eran mejores que las mayores. Ellos usualmente escogen las más bellas y jóvenes para sí mismos"."Había demasiada sangre en su cara"

Una pesadilla que continuaría. Después de pocas semanas, se aburrió de ella. "Abu Mohammed dijo: 'Yo tuve esta niña cuando era virgen. Ahora me aburre. Quiero otra'. Me vendieron a Abu Abdulá quien también me violó. A los pocos días, se aburrió de mí. Me vendió a Emad. Si no me hubiese escapado, me hubiera vendido también".

"Fuimos violadas hasta cinco veces al día", recoge Bushra, una joven de 20 años. "Una muchacha fue al baño y se cortó una de sus muñecas. Como no murió, se cortó la garganta. Los guardias me buscaron y me dijeron que fuese a identificarla. Dijeron que era mi amiga. No la pude reconocer. Había demasiada sangre en su cara. Los guardias la envolvieron en una sábana y la lanzaron a la basura".

Finalmente las tres chicas consiguieron escapar. Pero los intentos frustrados anteriores se saldaban con castigos, como explica Noor, que narra cómo fue torturada cuando se le atrapó intentando huir. "Salman y sus guardias me golpearon y me quemaron con cigarrillos. Salman me ordenó que me desvistiera, me dijo: 'Te advertí que no te escaparas, ahora sabrás cuál es tu castigo'. Dejó que los seis guardias entraran, cerraron la puerta y me violaron brutalmente. No sé cuántas veces".

Finalmente, las tres muchachas consiguieron escapar, para poder contar su historia, tras vivir en campamentos para desplazados internos en Irak.