Un centenar de detenidos en Salónica durante una manifestación contra la austeridad

Los agentes antidisturbios detuvieron hoy en la ciudad griega de Salónica a un centenar de personas y emplearon gases lacrimógenos y cargas para dispersar a grupos de manifestantes que les atacaron con palos y piedras, durante una marcha multitudinaria contra las medidas de austeridad.

Unas 20.000 personas protestaron en Salónica, la segunda mayor ciudad de Grecia, contra los recortes aplicados por el Gobierno socialista y algunos grupúsculos se enfrentaron con la policía, informaron las fuerzas de seguridad a Efe.

Unos 7.000 agentes se encuentran desplegados desde hace 48 horas en la localidad para mantener el orden durante la celebración de la 76 Feria Internacional Comercial de Salónica (DETH), inaugurada hoy por el primer ministro griego, Yorgos Papandréu.

Unas 10.000 personas se concentraron ante el recinto de la feria en protesta por las medidas de ahorro y una parte de los manifestantes se enfrentó con la policía.

Los agentes utilizaron gases lacrimógenos para dispersar a los violentos, que arrojaron a los policías piedras y bombas incendiarias, en un intento de romper el cordón de seguridad con el que han blindado el edificio de la feria.

Los manifestantes protestan por los recortes de sus ingresos, que en el sector público superan el 12 %, mientras que los taxistas claman contra la liberalización de su profesión.

Por su parte, los sindicatos de bomberos, policías y personal de la Guardia Costera denunciaron hoy en un comunicado que han perdido un 40 % en su poder adquisitivo, debido a los recortes y la inflación.

La tasa de paro en Grecia alcanzó en junio el 16 %, con más de 700.000 personas sin empleo, y con un tercer año seguido de recesión, que conlleva que la actividad económica haya caído un 7,3 por ciento en el segundo trimestre, según datos oficiales.

Papandréu se comprometió hoy a aplicar las reformas necesarias para seguir recibiendo asistencia económica internacional y salvar al país de la bancarrota.

También llamó a la unidad, al asegurar que cualquier otra opción es 'peligrosa para Grecia y sus ciudadanos'.