Las fuerzas de seguridad requisaron una mina a un diplomático de EEUU en el aeropuerto moscovita de Sheremétievo cuando se disponía a viajar a Nueva York. "Los artificieros confirmaron que, efectivamente, era una granada de mortero con detonador, pero sin explosivo, aunque había rastros del mismo en su interior", informó la Cancillería.
El incidente ocurrió esta mañana en la entrada de la terminal D, donde fue detectado un objeto parecido a una mina de mortero. En su defensa, el diplomático, que regresaba a su país tras concluir su comisión de servicio en Rusia, explicó que había adquirido la granada como recuerdo para su "colección privada", según informan las agencias rusas.
Debido al incidente, el diplomático perdió su vuelo, pero pudo cambiar el billete y regresar a su país, eso sí, sin el artefacto. La Cancillería rusa exigió explicaciones a la Embajada de EEUU, que fue informada por la policía aeroportuaria de lo ocurrido con su empleado.
La nota destaca que, a la vista de la importancia que las autoridades de EEUU conceden a la seguridad en el transporte aéreo tras los atentados terroristas de 2001, el diplomático "no podía desconocer que llevar una mina en el equipaje es algo muy grave". "Es decir, lo hizo conscientemente", resaltó.
Al tratarse de una persona que tiene una relación "directa" con las Fuerzas Armadas de EEUU, la Cancillería considera el incidente "una provocación" en una infraestructura de transporte de Rusia.
En su opinión, este intento de poner a prueba la seguridad del transporte en Rusia por medio de "un empleado" de la embajada se suma a las incursiones de buques y aviones de EEUU cerca de las fronteras rusas.
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