Las autoridades chinas han vuelto a dar un golpe de efecto en su lucha contra la corrupción encarcelando a Li Chongxi, que en el pasado fue un alto responsable anticorrupción de la provincia china de Sichuan. Este territorio del sur del país se extiende por una superficie casi igual que la de España, donde viven 87.250.000 habitantes.
Li Chongxi había sido estrecho colaborador del antiguo jefe de seguridad chino, Zhou Yongkang, también condenado por corrupción. Ahora se ha convertido en uno más de sus aliados políticos que han tenido que vérselas con la Justicia por haber aceptado sobornos.
Se trata de la última cabeza que el presidente Xi Jinping puede mostrar a la opinión pública como muestra de que su lucha contra la corrupción no se ha quedado solo en las palabras.Confesó sus crímenes
El delito que ha le ha costado una condena de 12 años de cárcel fue aceptar una cantidad equivalente a casi 1.600.000 euros en efectivo, bienes y derechos de desarrollos urbanísticos para compañías locales.
Según la agencia oficial de noticias de China, Xinhua, Li confesó sus crímenes y expresó su arrepentimiento ante el tribunal, donde fue acusado no sólo de aceptar sobornos, sino también de abuso de poder y de revelación de secretos de Estado.
Ayer mismo también fue detenido Zhang Yun, presidente del Banco Agrícola de China, uno de los cuatro grandes bancos comerciales del país. Según noticias de medios chinos, Zhang había sido apartado para ser investigado, un eufemismo que se emplea habitualmente para referirse a casos de corrupción.Índice de corrupción
La sociedad china ha incrementado notablemente en los últimos años su percepción sobre la corrupción, sobre todo en el sector público, algo que cada vez preocupa más a las autoridades de este país asiático.
En 2014 obtuvo 36 puntos en el Índice de Percepción de la Corrupción, publicado por Transparencia Internacional, lo que le hacía descender en el ranking de la posición 100 a la 174.
El gobierno no ha dudado en aplicar la pena máxima para los corruptos que han cometido delitos especialmente graves. En febrero de este año fue ejecutado el magnate Liu Han, uno de los hombres más ricos y poderosos de China, al que también se le atribuyeron 8 asesinatos. Le acompañaron en la condena capital cuatro socios, incluyendo su hermano.
Sigue @martinalgarra
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios