Kaitlyn Pullam, una joven de 17 años de edad, de Poplar Bluff, Missouri, falleció después de que su padre le dispararaaccidentalmente en la víspera de Navidad. Según el padre, que afirma queno sabía que el arma estaba cargada, efectuó el disparo desde una habitación contigua. La bala atravesó la pared y alcanzó la cara de la hija.
Cuando el personal de emergencia llegó a la casa, la adolescente no respondía y fue traslada al hospital de la localidad, donde se recuperó el pulso. Posteriormente fue trasladada al Hospital de St Louis Children donde permaneció en coma hasta que su familia decidió la retirada del soporte vital la víspera de Navidad.
El Pastor David Steward de la Primera Iglesia Metodista Unida de Poplar Bluff dijo que Kaitlyn "tenía metas y que ella estaba decidida a alcanzarlas.""De hecho, ella ya estaba graduada, pero había decido pasar un semestre más, sólo para estar con sus compañeros" comentó.
Según un estudio de Everytown los niños estadounidenses tienen dieciséis veces más probabilidades de morir en tiroteos accidentales que otros niños de otros países desarrollados. 2.694 niños y adolescentes murieron por armas de fuego en los Estados Unidos sólo en 2010según datos del Fondo de Defensa Infantil.
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