Los anuarios suelen ser el mejor recuerdo que los estudiantes tienen de su paso por el instituto. Sin embargo, los alumnos del centro de secundaria de la pequeña localidad californiana de Big Bear se quedarán este año sin su trofeo más preciado. Las autoridades han retirado el libro por la inclusión de una fotografía que algunos padres han denunciado como pornográfica.
La instantánea, denunciada ante eldepartamento del Sheriff el pasado jueves, muestra a un joven alumno del centro educativo, de 17 años, metiendo la mano por debajo del vestido de una compañera dos años menor que él.
Según han confirmado las autoridades al diario Los Angeles Times, la aventura sexual de la acalorada pareja, que forma parte de una imagen mucho más amplia y apenas se aprecia en un vistazo general, pasó desapercibida para los responsables de la elaboración y publicación del anuario.
Acusados sexo ilegal
La portavoz del Sheriff de San Bernardino, Cynthia Bachman, ha asegurado que la mayoría de los estudiantes ya ha devuelto el polémico libro a petición de las autoridades, aunque reconoció que un pequeño grupo de adolescentes se niega a entregar un recuerdo que les ha costado unos 40 euros.
Bachman también advirtió que los menores que se nieguen a devolver el anuario podrían ser acusados de posesión de pornografía infantil. Además, confirmó que el departamento del Sheriff ha interrogado a los protagonistas de la foto para determinar si hay pruebas suficientes para procesar al chico por aprovecharse de una menor.
A pesar de que ambos jóvenes son menores de edad, la ley penal de California podría permitir a las autoridades interpretar que los dos años de diferencia entre ambos constituirían una prueba de que se trató de una relación sexual ilegal, con lo que el protagonista de la foto podría enfrentarse a una pena de cárcel, en el caso de ser oficialmente acusado.
Sin ropa interior
El caso de Big Bear High School no es el primero en el que un instituto se ha visto obligado a recolectar un anuario por un descuido de índole sexual de alguno de sus estudiantes. En el Sickles High School de Florida se vivió una situación similar hace sólo dos años. Una alumna del centro decidió llevar una falda demasiado corta a la sesión fotográfica para el libro, y pensó que era buena idea no ponerse ropa interior para evitar que las marcas aparecieran en las instantáneas.
Pocas semanas después, las imágenes de las partes íntimas de la menor se convirtieron en un fenómeno viral en las redes sociales de Internet, y la joven y avergonzada madre obligaron a la policía confiscar todos los anuarios en los que aparecía la incómoda fotografía.
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