Y el agua se convirtió en vino... o en Lambrusco. Es el insólito hecho que el miércoles pasado vivieron los residentes de Settecani, una aldea entre Módena y Bolonia, al norte de Italia, cuando vieron que del grifo de su casas salía líquido rojo.
Se trataba, pues, de lambrusco, una bebida espumosa producida por la fábrica Lambursco Grasparossa di Castelvetro. En su página de Facebook, el fabricante explicó lo sudedido: "Debido a un fallo en la válvula del circuito de la lavado de la línea de embotellado, esta mañana salía vino de algunos grifos de Settecani".
Debido a una presión más alta que la del agua, el vino habría comenzado a circular por las tuberías de agua potable que conducen a las casas más cercanas a la bodega, según explican los medios locales.
El problema se "resolvió rápidamente", según especificó la compañía. Lo que se desconocen es el número de hogares que se vieron afectados.
Questo è il sogno di ognuno di noi appassionati di #lambrusco: vino che sgorga dal rubinetto... i magici scorci di #castelvetro, non a caso tra i borghi più belli d’Italia pic.twitter.com/ERtxhUYWtZ
— Francesco Dondi (@FrancescoDondi) March 4, 2020
Cose accadute oggi qui, a #castelvetrodimodena. Perché per un attimo dai nostri lavandini è uscito il #lambruscograsparossa. Ci sarà tempo per capire ma intanto un sorriso oggi, anche in questi momenti difficili, forse lo abbiamo donato.https://t.co/yXeUVR1Hrc pic.twitter.com/QmitLTX8He
— Giorgia Mezzacqui (@GMezzacqui) March 4, 2020
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