"Dónde estabas entonces cuando tanto te necesité. Nadie es mejor que nadie pero tu creíste vencer". La sintonía (y título) del nuevo programa de Ana Pastor en La Sexta, ¿Dónde estabas entonces?, no puede estar mejor elegida, ya que el tema Insurrección de El último de la fila define a la perfección el contenido de este documental semanal que, cada siete días, hará un retrato de un año de nuestra historia reciente.
En una era en el que la información en televisión va muy rápido. sin tiempo para pararse a explicar la forma en la que hemos llegado hasta el presente, este formato pone cara, voz y relato a que aquellos ciudadanos que cambiaron al país desde su cotidianidad.
Un programa que no se queda en la historia contada desde los despachos y baja al terreno de juego de la calle. El viaje empezó en 1977, el mismo año en el que nació Pastor. La periodista sale del plató para olvidarse de las prisas del directo y escuchar a los invitados en un formato que estructura con temperamento la historia, realizando un emocionante recorrido visual que entremezcla valiosa documentación -con incluso imágenes de archivo inéditas en España-, con recreaciones de contexto -por ejemplo, el accidente aéreo de Los Rodeos- y testimonios relevantes. Todo esto se articula con la voz de la propia Pastor y, también, con la presencia de cameos de periodistas de referencia, como Iñaki Gabilondo o Olga Viza, customizados de la época televisiva que refleja el formato.
Al final, como dice la mítica composición musical de Manolo García y Quimi Portet, el programa ¿Dónde estabas entonces? es sumergirse en "Retales de nuestra vida, fotos a contraluz". Acontecimientos que se han quedado, en ocasiones, en segundo plano pero que no deben quedarse en el olvido, sirviendo este espacio como didáctico contenido para escuelas.
Un programa que define la inteligente estrategia de programación de La Sexta para afianzarse como canal de referencia informativo de cara al futuro. La televisión vive un momento de cambio, donde el espectador ya no consume los contenidos como antes. Y no todos los canales generalistas soportarán de igual forma esta revolución en la forma de ver y sentir la televisión, que ya es una realidad.
En esta reinvención del modelo, lo tendrán más fácil aquellos operadores que hayan invertido en una marca que conecte con un público fiel en dos variables: en el directo -como la tele que acompaña en tiempo real al espectador- y en diferido -como compañía que produce contenidos de duración de una hora o menos, fáciles de compartir y ver bajo demanda en el instante y lugar que el espectador decida-.
¿Dónde estabas entonces? cumple este según requisito, que complementa al periodismo apasionado en vivo y en directo. El espectador ya sabe que si pasa un acontecimiento de calado, enchufa La Sexta y están para contarlo con su identificable tono. Ese tipo de televisión nunca morirá. Pero, además, también el consumidor demanda contenidos periodísticos que no se queden en el vaivén de la actualidad frenética y aporten información de mayor elaboración. Aunque, estos últimos, ya no tenga que verlos en riguroso directo -pero sí servirán de sustento a la identidad del canal tradicional de emisión lineal-.
"Ya no sólo basta con una pieza aséptica de un Telediario"
Formatos como Salvados de La Sexta, Cuando ya no esté de Gabilondo en Movistar Plus o, ahora, ¿Dónde estabas entonces? marcan ya la tendencia de lo que será la información en televisión en un futuro no muy lejano.
Llega la era del programa acontecimiento con tiempo para cocinar el reportaje, con una cuidada fotografía visual, al que acude un espectador que demanda espacios informativos con el tiempo suficiente de elaboración. Espacios que narran una historia que no se queda en la caótica superficie de flujos informativos de rueda de prensa y gabinete de comunicación y otorga herramientas para comprender lo que está sucediendo, los motivos y sus consecuencias. Hacia ahí va la televisión informativa: ya no sólo basta con una pieza aséptica de un Telediario.
En tiempos de sobreinformación sin digerir, la televisión informativa retornará a la esencia del periodismo con mirada propia, que complementa al frenesí del periodismo instantáneo, el del está pasando y lo estás viendo. La audiencia premiará la experiencia de entender y aprender del contenido frente a la prisa informativa de usar y tirar. Y ¿Dónde estabas entonces? consigue este objetivo retando nuestro pasado para entender mejor lo que somos.
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