Probablemente, Pablo Motos y Jorge Salvador no se imaginaban el redondo formato catódico que habían inventado cuando El Hormiguero se estrenó, una tarde de domingo de septiembre de 2006, en Cuatro.
Desde entonces, el programa no ha parado de crecer, ganar prestigiosos reconocimientos y hasta ha sido exportado a otros países como Portugal, Argentina, Brasil o Chile. La personalidad abrumadora del show, cimentada en infalibles pilares televisivos, ha convertido a El Hormiguero en una de las últimas creaciones españolas para la pequeña pantalla, junto a Tu cara me suena, más eficaces a nivel internacional.
Incluso el segundo canal más importante de China, Hunan TV, también ya ha estrenado con gran éxito de audiencia la adaptación de El Hormiguero al formato asiático. Lo han hecho dentro de Happy Hamp, un popular show semanal de casi dos horas de duración.
El canal Hunan TV y la productora de Pablo Motos y Jorge Salvador, 7yAcción (Otra Movida, Tonterías las justas, La guerra de los Sesos), firmaron el pasado octubre un acuerdo por 26 programas. Pero los excelentes datos de espectadores que ha logrado el show, se trata del espacio semanal más visto en China, han permitido la fulgurante renovación de la estancia de El Hormiguero en el gigante asiático por 24 semanas más.
Y es que 180 millones de chinos se han transformado en fieles seguidores de esta idea cien por cien española que ha pasado con éxito difíciles fronteras culturales. Esta notoriedad posiciona a la factoría de Pablo Motos y Jorge Salvador como la única productora española que consigue realizar un programa en China. Todo un logro para valorar en los tiempos que corren.
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