Los efectos especiales de 'Al Rojo Vivo': La Sexta experimenta con la 'realidad aumentada'

La fusión de Antena 3 y La Sexta en 2011 decidió proteger la independencia de sus informativos. A diferencia de la unión entre Telecinco y Cuatro en 2009, que centralizó todo el área de noticias en una misma redacción, Atresmedia mantuvo la redacción, dirección e identidad propia de cada canal. Habían aprendido de los errores de su rival.

7 años después, las factorías de información de Antena 3 Noticias y La Sexta Noticias siguen atesorando su independencia editorial que distingue la personalidad de una emisora de la otra pero, a la vez, las dos cadenas se nutren de los mismos adelantos tecnológicos.

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De hecho, en este arranque de curso, se ha realizado una inversión tanto en el plató de los informativos de Antena 3 como el de La Sexta para impulsar la línea visual de ambos estandartes de las dos cadenas. Ahí los dos canales coinciden en un oscuro y brillante suelo reflectante pensado para experimentar con la realidad aumentada. O lo que es lo mismo: grafismos animados que se introducen en el estudio de televisión como si fueran elementos en dimensión real ubicados en el decorado. 

Pero es Antonio García Ferreras quien, a priori, ya está utilizando más esta técnica para ilustrar los datos que va dejando la actualidad en el trepidante directo de Al Rojo Vivo. La Sexta ha rediseñado por completo la puesta en escena de su buque informativo insignia con un nuevo set que incorpora un gran ventanal hacia el cielo de Madrid.

Aunque, en realidad, tiene trampa: ese luminoso ventanal al cielo de Madrid se trata de una gran pantalla que deja de ser skyline para mutarse en gráficos como información extra, multipantallas con imágenes en directo o fondos temáticos que, de paso, identifiquen los externos especiales que paralizan la programación del canal cuando la actualidad lo demanda.

El plató de Al Rojo Vivo ha ganado versatilidad y grandilocuencia incorporando esta gran pantalla como protagonista escénica, pero también sumergiéndose en el mundo de la realidad aumentada. Así, si se quiere analizar un tema con más datos que clarifiquen lo acontecido se puede llenar el decorado de números, gráficos o personajes animados. Sin ir más lejos, esta semana, para enumerar los miembros de la Policía y la Guardia Civil desplazados a la Diada de Cataluña, el estudio de La Sexta se llenó de una especie de androides que simulaban ser miembros de las fuerzas de seguridad del estado. 

El plató de Ferreras ocupado de policías y guardia civiles por arte de la tecnología. Aunque muy reales no eran. Sus desvanecidos rostros incluso podían dar cierto miedo. Y es que Atresmedia ha sucumbido a la realidad aumentada y Al Rojo Vivo parece que no va a tener muchos complejos a la hora de aprovechar el invento. 

El constante y característico movimiento de manos de Ferreras hace que, por momentos, Al Rojo Vivo parezca Minority Report con ventanales a los tejados de Madrid que dejan de ser ventanales a los tejados de Madrid para mutarse en viajes a la última hora o con habitantes animados que surgen y se desvanecen delante de la mesa de debate del programa.

Son las nuevas tecnologías que llevan años experimentándose en países de nuestro entorno y que, ahora, con cierto retraso, empiezan a ser habituales en España para informar mejor y, de paso, espectacularizar aún más la información con el objetivo de atrapar la curiosidad de un espectador que parece más infiel que nunca. 

Porque en tiempos de sobreimpactos visuales y tanta oferta -en televisión tradicional, en televisión a la carta y en redes sociales- el periodismo debe ser también competitivo visualmente. La realidad aumentada ayuda, aunque, cuidado, puede ser ruido que no aporte nada. Al final, lo importante es narrar bien y con sello propio la información. Tal vez, por eso mismo, Pedro Piqueras lleva 12 años sin renovar el decorado de Informativos Telecinco y no le va mal.