OPINION

Los síntomas de debilidad de la programación de Telecinco

El liderazgo de audiencias de Telecinco es una realidad consolidada. La principal cadena de Mediaset ha congregado una audiencia fiel a través de una reconocible oferta de entretenimiento, en donde reina la tele-realidad y la prensa del corazón. Es más, la fórmula de sus principales programas se repite una y otra vez. Lo ha hecho durante años, sin dar síntomas aparentes de desgaste.

Pero esta tendencia está cambiando. El modelo del conflicto cíclico del reality o magacine de Telecinco empieza a no ser tan infalible. Los espectadores ya se las saben todas y sólo basta una alternativa creativa de contenidos para que cambie de bando el liderazgo de la cuota de pantalla.

Porque es falso el estigma de que las cadenas programan aquello que demanda la audiencia. Lo único cierto es que el público sólo puede elegir entre la oferta que se atreven a producir los canales de televisión. Y la falta de riesgo ha propiciado una homogeneización de programas que, como consecuencia directa, ha fomentado una merma de pluralidad de géneros.

En los últimos días, contundentes éxitos como el regreso de Tu cara me suena en la noche de los viernes de Antena 3 o el fervor por el reencuentro de Operación Triunfo en La 1 están demostrado que no sólo Telecinco es capaz de crear programas acontecimiento, que movilicen al público. También lo logran Antena 3, La Sexta y La 1 cuando sus espacios de entretenimiento están bien producidos. Es más, estos programas recuperan para la televisión a espectadores que se estaban esfumando de la pequeña pantalla. El motivo: hay un importante parte de los televidentes que se sienten huérfanos de propuestas televisivas que despierten su interés más allá de las peleas, los desamores, los quejíos y los polígrafos.

Las peleas, los desamores, los quejíos y los polígrafos están muy bien que existan en emisión, pero el resto de canales no han tenido la visión de atreverse en sus shows de entretenimiento con ideas que propiciaran más alternativas de contenidos. Programas como Tu cara me suena u Operación Triunfo constatan que hay unas grandes audiencias que regresan cuando hay un producto que está bien definido y cuida los detalles.

Porque el apoteósico dato de audiencias del reencuentro de OT no ha sido sólo consecuencia de reunir a viejos ídolos de la tele, sobre todo ha funcionado tan bien porque el equipo del programa ha entendido la importancia de contar una historia emocional sin quedarse en la superficie, la facilona música de tensión o el sentimentalismo barato. Al contrario, el programa ha trazado un retrato de una generación, rascando en la poderosa nostalgia pero, al mismo tiempo, realizando sana autocrítica desde dentro sobre las consecuencias de la fama de la televisión.

El excelente resultado de OT ha hecho descender la audiencia del asentado debate de Gran Hermano (en una edición que está siendo muy olvidable), mientras que las imitaciones y el espectáculo traviesamente positivo de Tu cara me suena ha quitado el liderazgo a Sálvame Deluxe. Y es que los contenidos de los que lleva años bebiendo Telecinco ya sufren cierta debilidad. La maquinaria de la cadena sigue perfectamente engrasada para el éxito de largo recorrido pero, cuidado, sus programas estrella ya no son indestructibles cuando se enfrentan con formatos que articulan la creatividad televisiva en otra dimensión lejos de la pelea básica y la tensión dramática made in Mediaset. Entonces se logra la atención de un tipo de público que está expectante de otro tipo de televisión. Existe una audiencia ávida de nuevos formatos, así que terminarán ganando los creadores con mirada propia y las cadenas que no se acomoden en el tópico. Ahora hace falta que, de nuevo, la intuición de los buenos directivos triunfe por encima de los fríos minutados de los estudios de audiencia.

> Los 11 factores que han llevado a Telecinco a 2 años ininterrumpidos de liderazgo de audiencias

@borjateran

Y ADEMÁS…

> El círculo vicioso de la creatividad en las cadenas de TV en España

> 3 mentiras que ha derribado 'Tu cara me suena' en los viernes

Lo que TVE debe aprender de su propia historia

8 trucos de Chicho Ibáñez Serrador que siguen siendo modernos hoy

4 anomalías de la TV en España que hemos terminado interiorizando como normales

> Los elementos cruciales para el éxito en TV que se han olvidado

> El problema de la emisión en diferido de los Juegos Olímpicos

> 22 vías de acción para la supervivencia de TVE

 >¿Qué tiene que aprender Antena 3 de Telecinco? ¿Y Telecinco de Antena 3?

Mostrar comentarios