"No tener publicidad es genial para Águila Roja, pero si la historia no es buena se notan más los fallos"

Pilar Nadal, productora ejecutiva de Águila Roja, ha explicado que la serie “nació con vértigo y ganas de hacer algo diferente con la idea de dar un giro a lo que había en el panorama audiovisual”. También ha asegurado que es cara, pero se gestó antes de la crisis y que no tener publicidad es bueno, aunque si la trama es mala se notan más los fallos. Su ponencia ha tenido lugar en el Curso sobre Ficción de la Universidad Carlos III donde se ha reunido con otros tres de los pesos pesados de la ficción española: los productores ejecutivos de “El internado” (Laura Belloso), “Aída” (Antonio Sánchez) y “Los Serrano” (Alex Pina).

La productora ejecutiva de Águila Roja ha contado que actualmente están escribiendo y grabando el final de la tercera temporada. “A pesar de que intentamos hacer una serie, utilizamos estándares cinematográficos y es tremendamente cara”. “Esta serie se empezó a gestar justo antes de la crisis, pero hoy día no se haría una serie así”, añadió.

Según Nadal, “el género de época y medieval era normal en el cine, pero no en la pequeña pantalla, y un grupo de personas liderado por Daniel Écija lo intentamos, era un riesgo y un reto porque no había series medievales o de época el mercado español”. La mayor dificultad de Águila Roja “radica en ser consciente de que es una serie, no una película”, ha afirmado.

Durante la mesa redonda que ha reunido a los cuatro productores ejecutivos, todos procedentes del mundo del guión, Laura Belloso (El Internado), ha destacado que “el rasgo distintivo de Globomedia radica en que los máximos responsables de las series somos guionistas”. “El hecho de los que tomamos las decisiones seamos guionistas hace que en las series manden sobre todo los contenidos, en conformidad con el sistema americano, donde ocurre lo mismo”.

Sobre el recorte de la publicidad en TVE, Nadal ha explicado que “no tener publicidad es genial para la serie, pero si la historia no es buena, no está bien tramada, se notan más los fallos”; también ha reconocido que en todas las series en el mercado español ha habido reducción de presupuesto y que hay que adaptarse sin perjudicar al producto.

Peso de tramas sobre personajes

Para Belloso, lo más difícil de su trabajo es mantener el tono, la línea editorial “y no caer en ciertas tentaciones”. En El internado la continuidad es fundamental: “cuando empezamos a escribir el primer capítulo, sabemos más o menos cómo va a ser el último”. La productora ejecutiva de El Internado ha defendido que en esta serie “pesan mas las tramas que los personajes, y gracias a esto, sin quitar importancia a ningún actor, podemos sobrevivir a las ausencias”.

Por su parte, Alex Pina, productor ejecutivo de Los Serrano, ha destacado que “la ficción está cambiando mucho y que vamos a tener que adaptarnos. Antes, los ocho millones de espectadores de “Los Serrano” eran un éxito, pero ahora lo es Águila Roja con cinco millones. La TDT se ha metido en la casa de todos y asistimos a una nueva perspectiva ante la ficción. Excepto los grandes formatos como Águila Roja, formatos familiares, todo lo demás está bajo un alto riesgo. Cada vez la gente se sienta menos a ver ficción con publicidad, y eso hace que la creatividad tenga que ser mayor y nos rompamos la cabeza para hacer los productos.”

Por último, el productor ejecutivo de Aída, Antonio Sánchez, ha señalado que en esta serie, que tiene que producir capítulos en cinco días y grabarse con público en directo, “a los equipos se les exige muchísimo, y el margen de error que tienen es muy pequeño”.