El último capítulo de Aída se rodó hace ya semanas. Pero Telecinco al analizar que los resultados de audiencia de la serie se mantenían e incluso crecían decidió renovar la temporada con 7 capítulos más.
Así que el equipo tuvo que rodar más episodios y cuadrar sus tramas antes del desenlace ya grabado. Pero se terminó. Esta mañana, Paco León lo anunciaba en su Twitter: "ahora si que sí. Hoy es el último día de grabación de Aída . Va a ser raro hacer al Luisma por última vez".
Los Estudios de la productora Globomedia acogen la grabación del último episodio que, en realidad, no será el último, pues el desenlace, que se emitirá el 1 de junio, ya fue grabado con la presencia de Carmen Machi.
Atrás queda una serie icónica, la telecomedia más longeva, con unos personajes que ya son unos clásicos de la televisión. Empezando por el propio Luisma que, con sus salidas de tono, consiguió transformarse en uno de los tontos más queribles de nuestra ficción.
Y es que Aída, en sus diez temporadas en emisión, ha conseguido el más difícil todavía: crecer con el tiempo en unas delirantes tramas en estado de gracia. Incluso sin su protagonista principal. Aída sobrevivió a Aída.
Será porque en Globomedia, productora de la serie, son unos maestros en adaptarse a las circunstancias con un dinamismo encomiable que permite que, sin un elemento clave de la historia, el engranaje funcione como si tal cosa. Esperanza Sur tiene eso: cada personaje está impregnado de un ADN bastante redondo. Desde Fidel hasta la abuela Eugenia o Mauricio Colmenero.
De hecho, casi ya se ha olvidado que Aída surgió del personaje de chacha que interpretaba Carmen Machi en 7 vidas, un acierto del director de casting Luis San Narciso, que supo elegir a la actriz perfecta.
Sin grandes decorados, sin grandes puestas en escena, Aída es el ejemplo de que con talento se puede hacer un producto muy divertido, una sátira reconocible de nuestra trapicheadora España de barrio.
El reflejo de una sociedad que está en la calle a través de unos personajes llevados al extremo pero, al mismo tiempo, con delirantes personalidades que son identificables para todos los miembros de la familia.
¿Cuál es el chiste más común en Aída?
El humor de contraste es uno de los recursos más eficaces en comedia. Lo han utilizado desde los Monty Phyton hasta Los Morancos. En las series americanas también es habitual, y en Aída ha sido crucial para arañar esa cómplice carcajada con el público. ¿Cuántas veces hemos visto al Luisma decir una cosa y al instante ejecutar justo lo opuesto?
Aída vive hoy la grabación de su último capítulo. la definitiva. Los actores ya vivieron esas sensación hace semanas cuando se rodó el final. Entonces, hubo 'milagro' y se decidió una prórroga. Pero, este lunes, sí será el último. Esperanza Sur será desmontado. Pero nos deja rememorables instantes preparados para la reposición.
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