¡Eureka!: la alquimia digital revive los manuscritos originales de Isaac Newton

Publicado por primera vez en julio de 1687, el 'Principia Mathematica' de Isaac Newton no sólo contiene las leyes del movimiento, sino también la Ley de Newton de la Gravitación Universal. Es ampliamente considerado como uno de los trabajos más significativos, sino el más importante, de la historia de la ciencia.

Ahora el manuscrito original, junto con otras anotaciones del genial físico y matemático, han sido puestas a disposición del público en más 4.000 páginas digitalizadas en el sitio web de la biblioteca on-line de la Universidad de Cambridge, la Cambridge University Library, que alberga la colección más grande e importante de los trabajos científicos de Isaac Newton (1642-1727).

Newton estaba estrechamente ligado con Cambridge. Llegó a la universidad como estudiante en 1661, se graduó en 1665, y desde 1669 hasta 1701 ocupó la Cátedra Lucasiana de Matemáticas. Bajo el reglamento de esta Cátedra, Newton tuvo que entregar una copia de sus conferencias y estudios a la biblioteca de la universidad.

Hasta ahora los detalles del "eureka" del genio británico, cuando dio con la clave para formular su famosa Teoría de la Gravedad, formaban parte de la historia apócrifa, de una biografía del científico escrita por William Stukeley en 1752. Stukeley fue el que registró con lírica el relato de la historia de la manzana que caía del árbol y que se convirtió en la fuente de sus ideas sobre la gravedad (concretamente aparece en la página 42 de la biografía).

Ahora, con estos papeles desclasificados más que digitalizados, surgidos del propio puño y letra de sir Isaac Newton, se pueden comprender perfectamente los momentos y las matemáticas que tuvo que echar este visionario para formular su famosa ley.

Los usuarios deben notar que, debido a su valor académico supremo, la colección de "los papeles de Newton" no estaba disponible para consulta en versión original. Solo los investigadores recomendados podían hacer la consulta mediante microfilm.

Ahora cualquier usuario puede ver los documentos digitalizados en tan alta resolución que se pueden enfocar cada facsímil al gusto, pero también ver las transcripciones que hacía para entender cómo funcionaba su mente.

Por ejemplo, se puede consultar el cuaderno de clase que Newton utilizó mientras era estudiante en el Trinity College desde alrededor de 1661 a 1665, que incluye muchas notas de sus estudios y, cada vez más, su propia exploración en las matemáticas, la física y la metafísica.

Este cuaderno contiene muchas páginas en blanco y todo indica que Newton lo empezó a partir de ambos extremos, para converger en el centro. También está el cuaderno que Newton usó en sus clases entre 1664 y 1665, que constituye una prueba del desarrollo del propio pensamiento matemático de Newton, incluyendo su estudio de las series infinitas y el desarrollo del teorema del binomio, la evolución del cálculo diferencial y su aplicación al problema de la cuadratura y la integración.

Aunque la joya más preciada es sin duda el monumental Philosophiae Naturalis Principia Mathematica, a menudo abreviado como el “Principia”, que fue publicado en julio de 1687 y que constituye la obra que supuso su consagración. En este trabajo, divido en tres partes, establece en términos matemáticos sus leyes del movimiento y hace las cuentas acerca de la gravitación universal.

A pesar de que Newton fue capaz de proporcionar una descripción convincente de los efectos de la gravedad, no dio una explicación suficientemente valorada de por qué la gravedad se produjo, por lo que trató de responder a estas preocupaciones mediante la elaboración de una nueva edición.

La Biblioteca de Cambridge ha digitalizado la primigenia copia de Newton de esta primera edición, que intercala páginas en blanco, por lo que tuvo suficiente espacio para las anotaciones y correcciones para su segunda edición, que finalmente se publicó en 1713.

Muchos filósofos han dicho desde entonces que estos descubrimientos fueron provocados por su interés en la magia y el magnetismo; y que sus teorías matemáticas no eran más que la plasmación numérica de teorías místicas inmemoriales

Y es que si las biografías y la colecciones nos han presentado a Newton como un caballero sin tacha, un mito de la Ilustración, (pero también sin ese punto de vista escéptico tan moderno), sin embargo, su intelecto y su legado científico en versión original todavía estaban oculto a los ojos de todos los mortales. Y ahora que lo podemos ver, resulta una obra prácticamente inexpugnable.

Fuente y consultas: Biblioteca de la Universidad de Cambridge