OPINION

Reciclaje de camiones-cisterna en apartamentos-barriles

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Aristide Antonas es un arquitecto ateniense, además de escritor con un doctorado en Filosofía, que busca demostrar que un aspecto importante de lo que podríamos llamar "civilización de hoy" es la posibilidad de reorganizar las cosas existentes para darles un nuevo uso.

Ése es el fin que busca con su "KEG apartment", un camión cisterna reciclado en apartamento que resulta ideal para nómadas por naturaleza. Mientras otros medios de distribución han sustituido el transporte de mercancías peligrosas por las carreteras, los camiones cisterna están entrando en tropel al desguace.

Reciclando estos vehículos de carga, el diseñador de Aristide Antonas, en colaboración con Katerina Koutsogianni, ha llegado a una vivienda inteligente y sostenible a la que sus habitantes se adaptan fácilmente.

En lugar de descartar los depósitos de transporte existentes como "espacios abandonados" para chatarra, éstos se transforman en habitaciones que puedan volver a funcionar como refugios móviles. Pueden ser utilizados como apartamentos de vacaciones o como pequeña oficinas transportables, si pensamos en sólo dos de alguno de sus múltiples usos.

Además, los apartamentos-barril pueden ser separados de sus cabezas tractoras y formar viviendas más estables para un período determinado. Incluso se podrían formar una comunidad de vecinos móviles que podrían organizarse en un mismo terreno. Para ver y ser visto, el frontal está formado por una enorme ventana circular en la dirección de la marcha, que hará de impagable terraza cuando se instala el trailer en tierra.

Para dotar de luminosidad al apartamento-barril se transforman las bocas de carga en lucernarias y se también se abren ventanas laterales en el cuerpo del depósito. El interior se basa en espacios a distintas alturas, conectados con escaleras, que aprovechan los puntos de mayor diámetro del barril.

Este proyecto nos recuerda mucho a la reutilización de contenedores de barco como viviendas sostenibles, aunque con la salvedad de que aquí el contenedor es cilíndrico y tiene ruedas, además de estar recubierto con un material aislante más efectivo. Por supuesto, la fontanería ya vendría de serie y ganaría en facilidad de ubicación, pues se necesitaría una grúa para su carga y descarga.

Bastaría con llegar con la cabeza tractora hasta el lugar elegido y plantarse allí. Esta cabeza tractora también podría utilizarse como mini-apartamento de invitados o cuarto anexo para el que ronca, pues la resonancia de un resuello dentro del barril debe ser casi imposible de aguantar...

Posibilidades de comercialización: 10%, parece difícil concienciar a la gente para que se meta en un ex-camión cisterna de ácido clorhídrico, y más en verano. Si fuera de vino...

Vía DPR-Barcelona

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