Un ultra-futurista rascacielos rumano para alumbrar el renacer chino en Taiwán

Para conmemorar el centenario de la fundación de Taiwán, y celebrar la fusión entre el distrito de Taichung y la ciudad, la República Popular China erigirá la "Torre de Taiwán" como un hito metropolitano. Este nuevo punto de referencia prevé tener una función similar a la Torre Eiffel o a la Torre Nacional de Canadá (CN Tower, como es conocida internacionalmente con sus 553,33 metros de altura) y ayudará a los visitantes y residentes a orientarse en el skyline de esta ya auténtica metrópoli mundial.

El presupuesto de la torre es de unos 125 millones dólares y, aunque el objetivo no es competir con los edificios más altos del mundo, en principio el observatorio debe proporcionar a los visitantes una visión clara del Estrecho de Taiwán que los separa del continente. La altura está previsto que sea al menos de 300 metros y debe de hacer una llamada a la responsabilidad por el medio ambiente y el uso de energías alternativas, para simbolizar el nuevo espíritu verde de la ciudad.

Esos fueron los requerimientos básicos del concurso internacional de proyectos para la torre, que acaba de ganar la empresa rumana Stefan Dorin Birou Arhitectură con un concepto de rascacielos ciertamente sorprendente, imponiéndose a 237 participantes de 25 países. La torre de 390 metros está diseñado para servir como una plataforma de observación y como edificio de oficinas; y albergará el museo de la ciudad y un parque urbano.

Dorin Stefan Birou Arhitectura tiene experiencia en edificios icónicos, ya que colaboró con el arquitecto Mihai Bogdan en el diseño de la Torre de Taipei 101, el edificio más alto del mundo. El proyecto se ha inspirado en un buena puñado de símbolos taiwaneses, como en las hojas del árbol de dinero y la forma de la isla de Taiwán, muy similar a la de una patata dulce vista en dirección de sur a norte (los taiwanese a menudo se llaman a sí mismos "los hijos de la patata dulce”). También hay otras interpretaciones de la forma de isla, uno de los cuales es una ballena en el mar si se mira de oeste a este.

Esas hojas serán 8 enormes ascensores con aspecto de zepelín que servirán de plataformas de observación para los turistas, que serían fabricados con materiales ligeros como el PTFE, para que puedan llenarse de helio y sean muy ligeros. Y nada peligrosos (recuerden, 8 es el número de la suerte chino).

Cada bandeja puede llevar de 50 a 80 personas hasta la parte superior para obtener unas vistas impresionantes de la ciudad. Esta suerte de góndolas hinchadas se deslizarán verticalmente por el tronco gracias a un fuerte campo electromagnético; se producirá con la energía eléctrica creada por la membrana de nueva generación que envuelve a los tanques de helio, capturándola a través de transmisión fotovoltaica.

Aunque por fuera el rascacielos puede parecer de otro mundo, además de los ascensores-dirigibles de helio la fachada está cubierta de paneles fotovoltaicos. Por debajo de los 85 metros de altura se albergará el museo y las oficinas, mientras que la porción superior de la torre estará ocupada por aerogeneradores de eje vertical para la obtención de energía renovable. Un sistema de fibra óptica que parte desde la cúpula será el encargado de la iluminación de las áreas del sótano y de los espacios del museo en la planta de tierra.

También estará dotado de bombas de calor geotérmicas para ayudar a reducir el gasto de calentar y enfriar las instalaciones, mientras que la huella de carbono del edificio se evaporará por la ventilación cruzada y la forma y altura de la torre, que creará un gigantesco "efecto chimenea" para la circulación del aire en las diversas áreas funcionales.

"Aparte del hecho que nuestro objetivo es diseñar una torre cuya silueta tenga un gran impacto en términos de identidad visual, nuestra solución es, al mismo tiempo, un modelo de arquitectura ecológica integral". Dorin Stefan

Posibilidades de levantarse sobre el Mar de la China oriental: 50%. Aunque la torre propuesta cuentan con una impresionante variedad de estrategias verdes, habrá que ver si su forma y tamaño se convierten en realidad en el diseño final. Ahora que DSBA ha ganado el concurso tienen la oportunidad de diseñar el proyecto definitivo de su torre y ajustarse al presupuesto. Podría comenzar a construirse en 2012.

Más info y fotos en alta: Taiwan Tower.