Tribuna global

Oro y plata: dos hermanos que crecen por buenas razones

Los inversores están mostrándose desencantados con el claro menosprecio que los bancos centrales y los gobiernos de todo el mundo han demostrado por el sentido común en relación al patrón oro.

Oro y plata: dos hermanos que crecen por buenas razones
Oro y plata: dos hermanos que crecen por buenas razones.
Pixabay

Los precios del oro y la plata han subido con fuerza durante los últimos cuatro meses: el del oro ha subido más de una cuarta parte y el de la plata casi se ha duplicado. Es perfectamente natural que ambos metales suban, al fin y al cabo, son hermanos: se dice que el oro es el dinero de los reyes y la plata, el de los caballeros. Dadas las condiciones económicas, es totalmente comprensible el mercado alcista actual en el que se encuentran ambos metales.

La razón se encuentra en que, finalmente, los inversores están mostrándose desencantados con el claro menosprecio que los bancos centrales y los gobiernos de todo el mundo han demostrado por el sentido común en relación al patrón oro, el denominado 'sound money'. La reciente relajación monetaria, el aumento de los balances de los bancos centrales y el aumento del gasto público como respuesta al coronavirus, pueden haber llevado al límite la confianza de los inversores en las monedas fiduciarias, especialmente en el dólar estadounidense.

Los rendimientos de los bonos gubernamentales se han vuelto tan bajos que es poco probable que superen la inflación y sus poseedores afrontan pérdidas en términos reales. Por el contrario, el oro y la plata son una reserva de verdadero valor. Cuando las oscuras y desgastadas prendas del dólar se rasgan, revelan un esqueleto repleto de deudas y los inversores, naturalmente, se mueven hacia la solidez del oro y el brillo de su noble hermano.

La plata se está poniendo al día

Durante los periodos alcistas de ambos metales, la plata, de pies ligeros, a menudo asciende más rápido que su hermano, más pesado y caro. En el reciente aumento de los precios de la plata juega un papel más importante el contexto económico actual que la demanda industrial adicional de este metal. El mercado de la plata física se ve empequeñecido por su mercado de futuros, y es que la plata se comercializa por lo que es: una divisa. Aun así, cabe destacar su uso, dadas sus características altamente electroconductoras, en componentes electrónicos para redes de telecomunicaciones 5G así como sus crecientes aplicaciones médicas.

Este entorno macro también es favorable para las compañías mineras cuyos costes operativos son generalmente mucho más bajos para la plata que para el oro, ya que la primera a menudo se extrae a la vez que se obtienen otros metales. Por tanto, el aumento de los precios de la plata es especialmente rentable para las empresas mineras.

En mi opinión, hay muchas sensaciones alcistas tanto para el oro como para la plata, y una mayor oportunidad para que su relación (el precio del oro dividido por el precio de la plata) se contraiga aún más, e incluso para que la plata continúe eclipsando al oro. En 2011, su ratio era de 32, por lo que el actual, situado en 84, sigue siendo alto. Para decirlo de otra manera, la plata tendría que duplicarse con creces para recuperar, como lo ha hecho el oro, su máximo de abril de 2011. A la plata todavía le queda mucho recorrido.

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