La mayor operación contra el tráfico de personas en Melilla se salda con 21 detenidos

  • La Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía han dado por concluida la denominada operación 'Gaviota', desarrollada en Melilla bajo al dirección y supervisión del Juzgado de Instrucción número 1, y que ha dado como resultado la desarticulación completa de la mayor organización dedicada al tráfico de seres humanos realizada hasta ahora en la ciudad, y que se salda con 21 detenidos, un imputado y 12 vehículos interceptados.

MELILLA, 28 (EUROPA PRESS) La Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía han dado por concluida la denominada operación 'Gaviota', desarrollada en Melilla bajo al dirección y supervisión del Juzgado de Instrucción número 1, y que ha dado como resultado la desarticulación completa de la mayor organización dedicada al tráfico de seres humanos realizada hasta ahora en la ciudad, y que se salda con 21 detenidos, un imputado y 12 vehículos interceptados. Según informó hoy la Delegación del Gobierno en un comunicado, la investigación, enmarcada en el análisis y fijación de objetivos de los vehículos que acceden a Melilla con inmigrantes ocultos en dobles fondos, se inició a finales del mes de julio de 2008. De este modo, la primera fase de la operación se llevó a cabo a mediados del mes de enero de este año, mientras que la segunda ha culminado hace unos días con la detención de cuatro personas, todas residentes en Melilla con edades comprendidas entre los 20 y 30 años. Las cuatro han pasado ya a disposición judicial. Según la citada fuente, el resultado obtenido en esta segunda fase ha sido producto de las labores de investigación realizada por ambos Cuerpos de seguridad sobre los objetos, documentación y pertenencias obtenidos en los registros domiciliarios que se llevaron a cabo a durante la primera fase de explotación a mediados de enero. La organización, según un portavoz gubernamental, se dedicaba de forma continua al pase a Melilla de inmigrantes de origen subsahariano en dobles fondos de vehículos. Así, indica que estaba formada por personas de nacionalidad española y marroquí, que asumían cada una de ellas su rol a ambos lados de la frontera. En Marruecos, concretamente, en las localidades fronterizas de Farhana y Beni Enzar, lugares donde se captaban a las víctimas de este tipo delictivo y se preparaban los vehículos para introducir en habitáculos infrahumanos a los inmigrantes que se jugaban la vida al intentar cruzar la frontera hacia Melilla ocultos en los dobles fondos practicados. En este sentido, han sido muchas las ocasiones en las que se han detectado episodios de inmigrantes subsaharianos que al ser extraídos de los dobles fondos mostraban evidentes síntomas de asfixia, quemaduras, mareos e, incluso, mujeres embarazadas que han visto peligrar su estado de gestación debido a las situaciones extremas en las que han sido transportadas. ABUSAR DE LA NECESIDAD Las personas que se encargaban de adquirir los vehículos para su posterior preparación mediante la práctica del doble fondo, eran los propios dirigentes de la red en Melilla, mientras que los conductores-titulares de los vehículos captados por esta mafia eran personas de escasos recursos económicos, algunas de ellas drogodependientes y otras con antecedentes penales y estancia en establecimientos penitenciarios, predominando entre todos su precaria situación económica y su "urgente" necesidad de dinero. Durante el transcurso de la operación, algunos conductores y vehículos de la organización fueron interceptados por las Fuerzas de Seguridad marroquíes en su labor diaria de fiscalización y control de los vehículos de Melilla que procedían a la reentrada en el vecino país, permaneciendo sus conductores aun en prisión en Marruecos. Las personas detenidas a lo largo de la operación han sido veintiuna, todos ellos varones con edades que oscilan entre los 20 y los 80 años. Diecinueve son de nacionalidad española y otros dos marroquí, pero con tarjeta de residencia en nuestra ciudad. A todos los miembros de esta red se les imputa un delito contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, tipificado en el actual Código Penal y pueden llevar aparejadas penas de hasta ocho años de cárcel, viéndose agravado en este caso por el delito de asociación ilícita. La investigación fue fruto de la estrecha colaboración y sincronización entre la Ucrif de la Policía Nacional y la Comandancia de la Guardia Civil, los cuales trabajaron durante más de nueve meses demostrando una capacidad y una profesionalidad intachable para combatir y frenar el tráfico de seres humanos en nuestra ciudad.

Mostrar comentarios