Lima, 17 feb (EFE).- Las mafias de narcotraficantes mexicanos y colombianos que operan en Lima se han declarado la guerra por el control de la droga en la capital peruana, que ya cobró una víctima en las últimas horas, publicó hoy la prensa local.
El diario La República informó que ayer tres presuntos sicarios del cartel de Sinaloa atacaron a tiros en el puerto del Callao, al norte de Lima, a dos narcotraficantes colombianos que intentaron venderles 350 kilos de cocaína falsa.
El periódico agregó que los tres mexicanos descubrieron que el cargamento ilícito estaba mezclado con harina, tal y como lo comprobó después la policía al intervenir el inmueble alquilado por los colombianos en el Callao.
Tanto los mexicanos como los colombianos implicados en este enfrentamiento, algunos de ellos heridos de bala, huyeron sin que se conozca hasta el momento su paradero.
Las fuentes policiales citadas por La República estiman que el mismo grupo de mexicanos asesinó el domingo pasado en el barrio de Chorrillos, al sur de Lima, a otro colombiano aparentemente vinculado con el falso cargamento de droga.
En este contexto, la policía peruana no descarta una guerra entre mafiosos de ambos países por el control de la droga en Lima, afirmó el diario.
Según informes de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), el cartel de Sinaloa controla más del 80 por ciento de la droga que se procesa en los Valles de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), una de las mayores zonas productoras de hoja de coca y cocaína en el país.
La República indicó que los mafiosos mexicanos reclutaron hasta fines de 2007 a colombianos para acopiar droga, pero que ese vínculo terminó en 2008.
El año pasado se detuvieron 21 mexicanos y 17 colombianos con 32 de las 40 toneladas de droga que decomisó la policía en todo el país, agregó el diario.
Según datos de Naciones Unidas, Perú es el segundo productor mundial de cocaína y hoja de coca, que se usa para fabricar esa droga, luego de Colombia.
La droga que se produce en Perú es sacada presuntamente por mafias mexicanas, principalmente por la vía marítima hacia Europa y Estados Unidos.
Tanto el gobernante peruano, Alan García, como el "zar antidrogas" del país andino, Rómulo Pizarro, han llamado la atención en diversas oportunidades sobre la presencia de carteles mexicanos en territorio peruano, lo que preocupa por la extrema violencia de los mismos.
Expertos internacionales han asegurado que los narcotraficantes mexicanos tienen presencia en 38 países, y sus tentáculos se han visto en Argentina, Guatemala, España, Estados Unidos, Italia y Perú, donde el cartel de Sinaloa es el operador más poderoso.
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