¿Quién es Cabeza de Cerdo?

Era el proxeneta más buscado de Europa, la Interpol iba detrás de él hasta que en 2012 se entregó. Ioan Clamparu era conocido como Cabeza de Cerdo y se sabe que obligó a prostituirse a más de 2000 mujeres. Las traía desde Rumanía a España engañadas con la promesa de que iban a trabajar en la hostelería pero finalmente acababan en la prostitución.

Era conocido por las brutales palizas que daba a las chicas, la fuerte vigilancia a las que las tenía sometidas y el miedo que inpiraba. En estos momentos cumple 30 años de prisión por los delitos dedeterminación a la prostitución(cuatro delitos),determinación de menor de edad a la prostitucióny al aborto. A pesar de que el líder había sido detenido, la banda siguió actuando hasta que este jueves han sido detenidas seis personas.

Ya en España, les exigían un dinero como deuda con la organización por el viaje. Para ello, "se valían de amenazas y agresiones físicas, les retiraban la documentación personal proporcionándoles otra falsa, las mantenían hospedadas en pisos donde eran controladas continuamente para evitar su fuga y vigilaban estrechamente sus movimientos".

Durante el juicio varias víctimas relataron cómo eran sorteadas entre los miembros de la organización para ser controladas. Cabeza de Cerdo controlaba varios clubes de Madrid y la Casa de Campo.

Las hacía trabajar en clubes y en la Casa de Campo, zona de sexo de pago totalmente controlada por Cabeza de Cerdo. Una de las jóvenes rumanas traídas a España en 2000 por la banda contó a la Policía que tras quedar embarazada le patearon el vientre hasta que empezó a sangrar.

La mujer recordó haber recibido palizas al llegar a España usando pasaportes falsos dados por la banda a cambio de 10.000 euros a pagar en tres meses. Aseguró que al día siguiente de llegar ella y otras jóvenes, todas rumanas, fueron llevadas a la Casa de Campo y el capo les pidió el nombre, los escribió en un papel y los metió en un frutero del que luego unos hombres sacaron a suerte la mujer que les iba a pertenecer como prostitutas.

Pepa, nombre ficticio de la mujer, identificó a Ioan en rueda de reconocimiento, añadió que le habían contado que el acusado habíaasesinado y descuartizado a tres mujeresy que a otra le habían atado para que la atacaran y mataran unos perros.

La investigación policial surgió en el año 2000 a raíz de las denuncias en varias comisarías de rumanas que decían estar siendo obligadas a prostituirse en la Casa de Campo, incluso con ropa que la propia banda les daba al llegar a Madrid con la falsa promesa de un empleo.