Esperanza Aguirre pide que Rajoy y su equipo se vayan del PP antes del 26J

Esperanza Aguirre pide la cabeza de Rajoy. Lo ha vuelto a hacer ahora que parece que la resignación y la calma han vuelto a un PP que confía en las elecciones. Rajoy ha dicho a los suyos que mejorará los resultados del 20D. De no hacerlo o que los resultados no fomenten los pactos, las voces que hablan de un relevo volverán. Algunas piden a Rajoy que se vaya antes de votar.

La expresidenta del PP de Madrid afirma que es necesario "cambiar el liderazgo" de su partido cuanto antes. Propone que se haga incluso antes de las próximas elecciones generales del 26 de junio. Descarta que vaya a dar el paso para optar a liderar el partido.

En una conversación en Red Floridablanca, Aguirre indica que el PP debe hacer autocrítica, ya que “ha perdido uno de cada tres votantes desde hace cuatro años”. Además, recalca que “no solo hay que cambiar el liderazgo, sino también el mensaje, los proyectos y las soluciones que proponemos a los españoles” y que, para ello, “es fundamental que se reúna a la gente con más talento”.

Esperanza Aguirre también se muestra partidaria de la celebración de un Congreso abierto en el PP: “El próximo congreso ya no puede ser de compromisarios […] Hay que dejar a los militantes que elijan al candidato que les parezca que se acerca más al ideal que tienen. Se ha acabado el tiempo de las nominaciones a dedo”.

En este sentido, la concejal en el Ayuntamiento de Madrid sostiene que “lo que sobra es partitiocracia en la política española. Parece que nos ocupamos solo de las cúpulas de los partidos, en vez de ocuparnos de los votantes, de los militantes, de los simpatizantes, e incluso de los mandos intermedios, concejales y alcaldes de pueblos pequeños, y gente que lleva muchos años apoyando al partido y que quiere tener algo que decir. Ya está bien de ocuparnos de las cúpulas”.

"No tengo ninguna duda" de que es necesaria una regeneración en el PP. "Si no somos capaces de regenerarnos habrá millones de españoles que se encontrarán sin una opción liberal-conservadora a la que votar".

"Porque yo sigo creyendo que la mayoría de los españoles siguen creyendo en los principios y valores liberales y conservadores, en la libertad, en la vida, en la propiedad, en el imperio de la Ley”, ha señalado la expresidenta del PP de Madrid, que también ha subrayado que esas son las ideas “que han hecho que la sociedad occidental haya proporcionado más progreso y libertad a todos los ciudadanos, y especialmente a los más necesitados”, añade. 

Cospedal no ha dudado en contestar a Aguirre y en quitar importancia a las opiniones de un grupo que no es el del PP:  "Me parece muy bien las ideas que tengan todas las organizaciones políticas, pero esa red no es el PP, no le doy mayor trascendencia. Esa organización a la que se refiere no es el PP, será su particular visión, no es la del PP, tampoco lo era cuando ella se presentó de candidata, pero no voy a seguir con este tema, porque no tiene gran trascendencia", ha señalado en un claro dardo a Aguirre.

Rajoy ha contestado a su modo. Apostando por Moragas, otra vez, como jefe de una campaña en la que no va a hacer amigos.Maroto y Cifuentes también pidieron renovación

Rajoy ha estado más que molesto con los nuevos cachorros del PP, esos que él mismo nombró para salir en televisión y renovar la imagen del partido. Maroto, el vicesecretario sectorial del PP, es uno de los más díscolos con algunas de las decisiones del partido aunque siempre respetando el liderazgo de Rajoy.

Eso sí, fue de los pocos que confesaron que le gustaría que “hubiese un proceso de selección del presidente del partido o de la presidenta del partido, de los candidatos, de las candidatas, de los contenidos...”.

No era poco. A esa línea se sumó otra de las voces más representativas y poderosas hoy del PP: Cifuentes. No solo pidió primarias para el PP Nacional sino que también lo hizo para su Comunidad. "Nos ha faltado cercanía. Nos ha faltado humildad y sensibilidad social. Nos ha faltado proximidad... Y nos ha sobrado corrupción", también ha dejado claro sin apuntar a nadie.Aznar pidió claramente un nuevo liderazgo

José María Aznar es uno de los que más directamente ha pedido la cabeza de Mariano Rajoy. Para ello ha dicho a los suyos que lo mejor sería un congreso abierto para dar paso a un nuevo liderazgo en el partido. Así, tan claro.

El exjefe del Ejecutivo solicitó que ese congreso se celebre lo antes posible y aclaró que él no se presentaría al mismo. La declaración fue tan breve, ante la cúpula y los barones del partido, como rotunda. Rajoy acaba de ganar las elecciones perdiendo 3,6 millones de votos. Aznar pidió una reflexión profunda.

Aznar lo dejó claro. Quería un Congreso, como señalan los Estatutos que esta vez debería ser abierto para que los militantes definieran el futuro de nuestro proyecto y elegir la dirección del partido. El expresidente de la Región de Murcia Alberto Garre también dejó claro lo que él consideraba un clamor silencioso dentro del PP, que Rajoy, que no era un lastre sino un activo, se diera cuenta de que lo mejor para él y para el partido era dar un paso atrásFloridablanca ya pidió que Rajoy diera un paso atrás

Las elecciones europeas supusieron una vuelta a 1987, cuando el Partido Popular todavía era Alianza Popular. Entonces obtuvo el apoyo de un 24,65% del electorado. En las elecciones europeas de 2014 contó con la confianza de un 26,09%. Las elecciones autonómicas y locales fueron un regreso a 1991. En éstas obtuvo el 25,34 % frente al 27,06% que alcanzó en las elecciones autonómicas y locales de este mismo año. Finalmente, en las elecciones generales habría que retroceder hasta 1989 con un resultado del 25,79%. Esas son las conclusiones de un documento muy crítico con Rajoy y sus forma de gestionar el partido. 

En estos cuatro años el PP ha desandado el camino de un centro-derecha fuerte e integrador que le permitió constituirse como alternativa real de gobierno. Esa voluntad integradora de ser la “casa común“ que ofrece un proyecto liberal-conservador con ideas renovadas fue la clave de los sucesivos éxitos electorales del PP a partir de 1996. Precisamente eso es lo que se ha roto en estos últimos cuatro años: el PP ha perdido cuadros, afiliados y votantes en toda su amplia base social e ideológica, lo que ha provocado la fragmentación del espacio electoral del centro-derecha.

Es evidente que en los últimos tiempos, el PP no ha sabido mantener su vocación de mayoría y, en consecuencia, se ha debilitado como proyecto político. La ausencia de un proyecto claro, identificable y coherente, la renuncia a dar la batalla de los valores y de las ideas  y los casos de corrupción que han afectado a la formación, así como el deficiente funcionamiento interno de la misma, son los principales factores que han contribuido a un progresivo alejamiento de la sociedad. Un alejamiento notorio, que el presidente y la dirección actual no han querido remediar abriendo la organización y renovando el discurso para mantener unidas a las distintas familias del centro-derecha.

Ante esta situación, la organización cree que para recuperar el proyecto político del Partido Popular resulta imprescindible la convocatoria de un congreso nacional abierto a la participación de todos los afiliados. Un congreso basado en el principio “un militante – un voto”, que siente las bases de una democratización definitiva del partido y que inicie el ineludible proceso de renovación interna.