Alcalde Creixell denuncia municipio está paralizado por deuda de 11 millones

  • El alcalde de Creixell (Tarragona), Jordi Llopart (CiU), ha denunciado hoy que el ayuntamiento está "paralizado" por la deuda dejada por el anterior equipo de gobierno, del PP, que ascendería "a unos 11 millones" en un municipio de unos 3.000 habitantes.

Creixell (Tarragona), 6 jul.- El alcalde de Creixell (Tarragona), Jordi Llopart (CiU), ha denunciado hoy que el ayuntamiento está "paralizado" por la deuda dejada por el anterior equipo de gobierno, del PP, que ascendería "a unos 11 millones" en un municipio de unos 3.000 habitantes.

Llopart gobierna ahora en Creixell gracias a un acuerdo de legislatura tras las elecciones municipales entre CiU, PSC, ERC e ICV que dejó en la oposición al PP, que gobernó en el anterior mandato con Teodoro Fuster como alcalde.

A su juicio, según ha dicho a Efe, la prioridad ahora del nuevo gobierno es "la economía" pues, aunque "sabían que la deuda era importante", no imaginaban que llegara a tanto.

En este sentido, Llopart ha expuesto que la deuda del consistorio con la Seguridad Social y con Hacienda es de 850.000 euros, lo que "impide recibir subvenciones".

Además, el anterior consistorio no envió a la Sindicatura de Cuentas la liquidación del 2009, por lo que "algunas subvenciones para obras también están paradas".

Por ello, el ayuntamiento actual ha encargado un estudio para ver cómo hacer frente a la situación económica del consistorio, con unos ingresos de 210.000 euros mensuales, y unos gastos de 325.000 euros en el mismo período, lo que provoca una situación "insostenible".

Llopart denuncia que se deben 7,11 millones a proveedores, más de 3 millones en créditos y, además, hay que sumar una partida por contenciosos por reclamaciones de impagados, con sus correspondientes intereses, con lo que la deuda total es "de unos 11 millones" para un municipio de 3.000 habitantes.

Asimismo, Llopart denuncia otra operación ruinosa del gobierno del PP por el que se avanzaron 3 millones en concepto de alquiler y obra a una constructora en el 2008, en plena crisis inmobiliaria, para construir en cuatro zonas municipales una residencia, un centro de día y dos edificios de 40 apartamentos tutelados cada uno, pese a las denuncias de la oposición, que no lo veía viable.

La sorpresa ha llegado al saber el pasado 6 de junio que un aval municipal sobre ese pago, por valor de 1,96 millones, "estaba falsificado", dice Llopart, que se queja del "mucho dinero gastado" por un consistorio que ha funcionado con el presupuesto prorrogado "desde el 2006".

Mostrar comentarios