Toda la oposición reprocha a PP su rodillo por rechazar el control a Gobierno

  • La mayoría del PP impedirá previsiblemente en el Congreso tomar en consideración la reforma del reglamento que pedía el PSOE para obligar a comparecer al presidente del Gobierno si lo pide toda la oposición, que ha echado en cara al grupo popular el "rodillo" y el "bloqueo" del control parlamentario.

Madrid, 10 sep.- La mayoría del PP impedirá previsiblemente en el Congreso tomar en consideración la reforma del reglamento que pedía el PSOE para obligar a comparecer al presidente del Gobierno si lo pide toda la oposición, que ha echado en cara al grupo popular el "rodillo" y el "bloqueo" del control parlamentario.

Durante el debate en el pleno, el secretario general del grupo socialista, Eduardo Madina, ha criticado duramente al Ejecutivo al afirmar que "no se recuerda ningún Gobierno en democracia que haya ocultado tanto y que se haya ocultado tanto para no dar la cara ni ante el Parlamento ni ante la ciudadanía".

Así, ha recordado que el PP ha vetado una tras otra las peticiones de comparecencia del presidente, las interpelaciones de la oposición sobre el caso Bárcenas y la solicitud de creación de una comisión de investigación sobre la financiación de partidos.

Frente a ello, el PSOE pretendía "profundizar" en el control de la acción del Gobierno que la Constitución atribuye al Parlamento con una reforma del reglamento para que, cuando todos los grupos de la oposición soliciten la comparecencia del presidente, tenga que celebrarse en un plazo de díez días.

El diputado socialista ha pedido al PP "un gesto" y le ha advertido de que "el miedo no es buen acompañante en política, que uno no está en el Gobierno para siempre y que las instituciones no son de los partidos, sino de los ciudadanos" a quienes representan.

Por el contrario, el popular Ignacio Astarloa ha defendido su posición en contra de la propuesta, que se votará hoy, y ha tachado de "frívola improvisación" la estrategia del PSOE que, con esta "excusa", "trata de hacer política partidista a costa del reglamento" e intenta "desgastar" al Gobierno.

Astarloa cree que no es admisible que "carentes de propuestas para mejorar el país, desciendan algunos a buscar tajada" deslegitimando las normas y las instituciones, lo que a su juicio es un camino seguro para que la democracia sufra "daños irreparables".

"Puestos a hablar de abusos, ustedes tienen el dudoso honor de haber pasado a los libros de historia como los genuinos inventores del rodillo parlamentario", ha respondido Astarloa a Madina.

No obstante, el resto de los grupos ha apoyado la propuesta socialista y ha coincidido en lamentar que los populares rechacen "sistemáticamente" las iniciativas de las demás fuerzas políticas.

Desde la Izquierda Plural, Chesús Yuste ha considerado que no es suficiente porque con esa "pequeña reforma" no se podrá hacer frente a la "peor involución política" en 35 años de democracia.

Ha reclamado un debate global para reformar el reglamento y, entre las medidas que ha puesto sobre la mesa, ha ido más allá al reclamar que la comparecencia del presidente del Gobierno sea "obligatoria" cuando lo pidan al menos dos grupos parlamentarios.

Nadie debe tener miedo "a más democracia", ha enfatizado.

También CiU apoya la iniciativa porque ve "sano" para la democracia introducir mecanismos de control al Gobierno, según ha señalado la diputada convergente Montserrat Surroca, aunque hubiera preferido que no se sustentara únicamente en el caso Bárcenas y que se hubiera planteado en el marco de la reforma del reglamento.

Rosa Díez, de UPyD, ha pedido a los populares una "reflexión" porque evitar que la oposición ejerza el control al Gobierno no es propio de un país democrático y ha advertido de que, con ese "desprecio olímpico" al Parlamento, el PP "desprecia a los ciudadanos y a la democracia".

Muy crítico ha sido también el portavoz del PNV Aitor Esteban, que cree que la propuesta del PSOE se queda corta ante la actitud del PP de utilizar su mayoría absoluta para bloquear las iniciativas del resto de los grupos.

"Están creando un problema muy serio, están eludiendo el debate sobre las cosas que interesan a los ciudadanos y están cabreando, ya lo creo que sí, a todos los demás grupos parlamentarios", ha concluido.

Una postura que han compartido Joan Tardá, de ERC, Joan Baldoví, de Compromis-Equo, y Olaia Fernández, del BNG, que también han lamentado que el "rodillo" del PP vuelva a imponerse para rechazar esta iniciativa.

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