La justicia escocesa revisará de nuevo la extradición de Clara Ponsatí el 12 de junio

  • Las partes acordaron que su defensa pida a la fiscalía, que actúa en representación de España, que solicite información legal más precisa. 
Fotografía Clara Ponsatí a la entrada al juzgado de Edimburgo
Fotografía Clara Ponsatí a la entrada al juzgado de Edimburgo
EFE

Un tribunal de Edimburgo fijó este martes una nueva vista preliminar del juicio de extradición de la exconsejera catalana Clara Ponsatí para el 12 de junio, con el objetivo de recabar información de las autoridades españolas sobre los cargos de los que se le acusa.

Durante una breve vista celebrada el miércoles, las partes acordaron que la defensa de Ponsatí pida a la fiscalía, que actúa en representación de España, que solicite información legal más precisa sobre las imputaciones que pesan sobre la exconsejera.

En marzo, el Tribunal Supremo español emitió una euroorden de detención contra la política por delitos de rebelión y malversación de fondos públicos relacionados con la celebración del referéndum ilegal de 2017 en Cataluña.

En la audiencia, que duró algo más de media hora, se acordó que el abogado defensor de Ponsatí, Gordon Jackson, pida a la Fiscalía, representada por Michael Meehan, que transmita a las autoridades judiciales españolas una solicitud de información sobre la definición de los cargos que se le atribuyen a la política.

Antes del inicio del juicio, previsto para el 30 de julio, se celebrará una nueva vista procedimental el 5 de ese mes. Tras personarse ante el tribunal, Ponsatí compareció ante los medios de comunicación congregados a las puertas de la corte, acompañada de su representante legal, Aamer Anwar.

"Una persecución motivada políticamente" 

De acuerdo al sistema judicial británico, Ponsatí cuenta con dos abogados, Anwar, que es su representante legal, y Jackson, que ejerce su defensa ante la Justicia escocesa. Anwar leyó un comunicado, en nombre de su representada, en el que señaló que los argumentos que se presentarán para rechazar la entrega a España se basarán "en muchos motivos, incluida la afirmación de que se trata de una persecución motivada políticamente".

Insistió en que el hecho de extraditar a Ponsatí sería "injusto, opresivo e incompatible con los derechos humanos". "España ha fallado en especificar un solo acto de violencia atribuible a Clara Ponsatí y las alegaciones a las que se enfrenta son una grotesca distorsión de la verdad", sostuvo.

"Exconsellera en el exilio" 

Ponsatí, que se define como una "exconsellera del Govern catalán ahora en el exilio tras el referéndum de octubre de 2017", afirma que no ha cometido nunca ningún delito y que lo que hizo fue promover una votación pacífica y democrática incluida ahora en una causa por presunta sedición y rebelión.

Critica que "no hay ninguna garantía de un juicio justo en España" y lamenta que miembros del Govern cesado ya se encuentran en prisión preventiva por orden del magistrado Pablo Llarena. "Si regreso, creo que es probable que acabe sujeta al trato degradante e inhumano de las autoridades" por la forma de actuar del Gobierno español, arguye.

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