Philippe ha sostenido que tendrá en cuenta las manifestaciones en contra de su plan de reforma laboral y se ha comprometido a seguir adelante con ella.
Miles de sindicalistas de extrema izquierda protagonizaron manifestaciones por varias ciudades francesas este martes contra la reforma laboral impulsada por el presidente del país, Emmanuel Macron.
Después de semanas de negociaciones, el Gobierno fijó en agosto una serie de medidas económicas, incluido un recorte en las indemnizaciones por despisos improcedentes y mayor libertad para las empresas a a la hora de contratar y despedir.
Philipe ha asegurado que, aunque está siguiendo de cerca las manifestaicones, las elecciones de este años han demostrado que los franceses apoyan las reformas económicas. "Estoy escuchando y estoy prestando atención pero déjenme decir que los franceses, cuando votan, también tienen derecho a ser tratados con respeto. La reforma que estamos poniendo en lugar fue anunciada por el presidente en periodo electoral", ha asegurado el 'premier' galo, en declaraciones a la cadena de televisión France 2.
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