La escisión de un diputado antimusulmán deja al Gobierno holandés sin mayoría

La Haya, 20 mar,- Un diputado del partido antimusulmán holandés PVV, Hero Brinkman, anunció hoy su escisión de esa formación política en el Parlamento, con lo que deja sin mayoría al Gobierno holandés, al que en principio mantendrá su apoyo como independiente.

Holanda está gobernada por una coalición en minoría formada entre liberales y democristianos, que cuenta con el apoyo en el Parlamento de los anti-islámicos de Geert Wilders con los que hasta ahora sumaba una ajustada mayoría de 76 asientos en un Parlamento de 150 escaños.

Brinkman afirmó en una rueda de prensa que no dejará "en la estacada" a la coalición del liberal Mark Rutte y que esperará "el resultado de las negociaciones" que su expartido mantiene en estos momentos con la coalición sobre nuevos recortes presupuestarios.

La escisión de Brinkman, que seguirá en el Parlamento como diputado independiente, responde a sus críticas a la página de internet de su partido (PVV), donde se anima a los ciudadanos a denunciar a los inmigrantes de Europa oriental que viven en el país.

"No estoy de acuerdo con que se trate a los ciudadanos del Este como criminales", dijo Brinkman, tras aclarar que le hubiese gustado ver un proceso de democratización interna en el partido dirigido por el discutido Geert Wilders.

La página web lanzada por Wilders ha generado críticas dentro y fuera de Holanda, incluido el Parlamento Europeo, pero el primer ministro Rutte no se ha distanciado directamente de esa iniciativa y ha aducido que responde a una propuesta de un partido político que hace uso de su libertad.

Sin embargo, analistas políticos opinan que Rutte no quiere poner en peligro las complicadas negociaciones sobre el ajuste presupuestario que, junto con los democristianos, mantiene con sus socios antimusulmanes en el Parlamento.

Esta negociación entre los dos socios de la coalición con su aliado parlamentario se lleva a cabo en un completo secreto.

Las últimas previsiones estiman que el déficit público holandés será en 2013 del 4,5 por ciento del PIB, por lo que Holanda tendría que aplicar nuevos recortes de al menos 9.000 millones de euros, por encima de los 18.000 millones de euros ya anunciados por el Gobierno para esta legislatura, que dura hasta 2014.