Los diputados quieren que los españoles nos vayamos a casa a las cinco de la tarde

    • La Comisión de Igualdad aprueba hoy un informe pactado por todos los grupos parlamentarios que insta al Ejecutivo a impulsar una nueva Ley de Conciliación y Corresponsabilidad.
    • Los diputados recomiendan un permiso de paternidad obligatorio de mes y medio, la generalización de la jornada de 9 a 5 y valorar la extensión de la 'hora menos' de Canarias a toda España.

B.P.V.

¿Qué le parecería salir todos los días de trabajar a las cinco de la tarde? Tendría que olvidarse de la media hora del cafelito mañanero y de la hora larga que seguro dedica al almuerzo. El pacto pasaría, en concreto, por tener media horita para comer y, a cambio, disponer de buena parte de la tarde libre para hacer cualquier tipo de actividad o poder llegar a casa antes de que el sol se ponga o sus hijos se hayan metido en la cama. Es decir, vivir como un europeo.

Ese, al menos, es el ideal sobre el que se han puesto de acuerdo todos los grupos políticos con representación parlamentaria en un informe sobre conciliación laboral y racionalización de horarios que será aprobado con toda probabilidad este jueves por la Comisión de Igualdad del Congreso.

Este informe de propuestas, que sus señorías confían que se convierta en la hoja de ruta para una futura Ley de Conciliación y Corresponsabilidad, insta al Ejecutivo a hacer lo posibe para implantar la jornada nine to five en todos los sectores en que sea posible, en su caso, principalmente en la Administración.

Los informes realizados al respecto indican que los españoles salimos de trabajar dos horas más tarde que nuestros vecinos europeos, lo que no nos ha servido para aparecer a ojos de los alemanes, por ejemplo, como los trabajadores más celosos y productivos del continente.

"La clave de la productividad no está en trabajar más horas, sino en ser más productivo durante las horas en que se trabaja", resume la diputada del Grupo Catalán, Lourdes Ciuró, para explicar la filosofía de la medida.

"Somos conscientes de que este cambio de jornada no es una responsabilidad estrictamente gubernamental, sino que son los convenios colectivos y los planes de igualdad el contexto idóneo para promoverlo, por ello necesitamos del compromiso de los agentes sociales", aclara.

Pero para los agentes sociales los asuntos de jornada no han sido hasta ahora más que una pieza marginal de una negociación centrada básicamente en los salarios. ¿Es posible que esto cambie?Diagnóstico claro, tratamiento difícil

En los últimos quince años, hasta tres subcomisiones parlamentarias se han constituído para averiguar qué medidas serían las más eficaces para racionalizar los horarios de trabajo y facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar.

Los avances han sido muy puntuales y han respondido más a impulsos políticos episódicos (Ley de Igualdad, permiso de paternidad) que a una política realmente orientada en este sentido.

Las conclusiones de esta Subcomisión para la Racionalización de Horarios, la conciliación de la vida personal, familiar y laboral, y la corresponsabilidad no difieren mucho de las alcanzadas por sus precedesores.

Bueno, sí, hay una medida particularmente audaz que ha desencadenado un animado debate público, pero que tiene pinta de ser más anecdótico que trascendente: la petición al Gobierno de que estudie la implantación en España del huso horario británico o canario. Es decir, ponderar los beneficios de retrasar de manera permanente el reloj una hora en nuestra vida cotidiana.

¿Qué argumento sustenta esta petición? Uno de marcado carácter socioeconómico. Sostienen sus señorías que compactar la jornada de trabajo sería mucho más sencillo si en lugar de anochecer a las siete lo hiciera a las seis, ya que las empresas tratarían de evitar el pico de consumo energético que se produce en los centros de trabajo cuando se va el sol y fomentarían horarios más conciliables con la vida personal.

El sistema se apuntalaría, después, con modificaciones de la normativa para, por ejemplo, premiar en los concursos públicos a las empresas que hayan desarrollado mecanismos de conciliación e igualdad en sus centros de trabajo y con cambios en los hábitos de ocio como adelantar un par de horas el prime time televisivo.

"No es ninguna quimera. Los partidos de Champions League son a las nueve menos cuarto y tienen grandes audiencias, ¿por qué mantener la franja horaria más potente más allá de las diez?", señala la diputada catalana.Permiso de paternidad de 16 semanas

El cuarto eje de la estrategia de conciliación consensuada por los grupos parlamentarios afectaría al tratamiento de la paternidad.

Los diputados de todas las formaciones, incluidos los del PP y PSOE (por citar los que han congelado la extensión prevista para el permiso de paternidad), respaldan la equiparación del permiso de maternidad y paternidad para configurar un permiso único al estilo de lo que sucede en Alemania: un nuevo permiso parental.

Éste garantizaría a ambos progenitores seis semanas de descanso obligatorio y otras diez de reposo potestativo sin perder el salario.

A efectos prácticos la aplicación de esta medida supondría la ampliación obligatoria de 15 a 45 días del actual permiso de paternidad, incluso pudiendo llegar a superar los 100 días en caso de disfrutar de la totalidad del periodo potestativo.

Los diputados han coincidido en que éste sería el esquema ideal para fomentar la corresponsabilidad de tareas entre ambos progenitores en el ciudado de sus pequeños desde el primer momento.

¿Posibilidades de éxito? Escasas. De hecho, lo único que hace el informe es instar al Gobierno a estudiar la viabilidad económica de esta iniciativa. En un contexto en el que se ha suspendido sine die el compromiso de extender el permiso de paternidad a un mes, valoren ustedes las posibilidades de éxito de la propuesta...

Mostrar comentarios