Un ministro boliviano dice que el presidente del Supremo va a terminar en la cárcel

  • La Paz, 22 mar (EFE).- El ministro de Defensa de Bolivia, Wálker San Miguel, afirmó hoy que el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Eddy Fernández, va a terminar en la cárcel por su responsabilidad en la dilación de varios procesos contra ex autoridades.

La Paz, 22 mar (EFE).- El ministro de Defensa de Bolivia, Wálker San Miguel, afirmó hoy que el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Eddy Fernández, va a terminar en la cárcel por su responsabilidad en la dilación de varios procesos contra ex autoridades.

San Miguel, abogado de profesión, dijo en entrevista con la televisión estatal que Fernández "en algún momento va a entrar a la cárcel" por "retardación de justicia" en casos, entre otros, como el del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, acusado de genocidio.

Sánchez de Lozada, que se encuentra en EE.UU., renunció a su cargo en octubre de 2003 obligado por una ola de protestas sociales que se saldó con más de 60 muertos en las calles de La Paz, El Alto y el altiplano, pero el juicio en su contra aún no ha comenzado.

Fernández se ha excusado hasta en tres ocasiones de hacerse cargo del juicio contra el ex mandatario, la última la semana pasada, cuando fue apartado del caso porque su hermana ha trabajado como abogada para uno de los acusados.

El ministro San Miguel acusó al magistrado de protagonizar maniobras dilatorias en este proceso, de ser "indigno" de su condición de magistrado y agregó que "tiene que irse de la Corte Suprema", de la que además dijo que actualmente es un "órgano podrido".

El Movimiento al Socialismo (MAS), el partido del presidente Evo Morales, abrió la semana pasada una investigación contra el presidente del Supremo por su presunta responsabilidad en el retraso del juicio a Sánchez de Lozada y a otros ex funcionarios acusados de corrupción.

Para la oposición, el Gobierno quiere destituir a Fernández con la presión de esta investigación.

Morales y su partido mantienen desde hace meses una dura confrontación con altos cargos del Poder Judicial que, según el gobernante, tiene magistrados que se oponen a sus reformas políticas o no actúan frente a la corrupción.

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