El envejecimiento disparará la deuda y el déficit de España si no hay reformas, según S&P

"En nuestra opinión, el envejecimiento de la población ejercerá una presión sustancial sobre el crecimiento económico y las finanzas públicas", señalan los analistas de S&P, que pronostican un aumento de la demanda de cuidados sanitarios públicos a largo plazo, así como del cobro de pensiones.

En este sentido, la calificadora de riesgos apunta que, en caso de no adoptarse más reformas, algo que no supone el escenario central de S&P, el gasto público total relacionado con el envejecimiento de la población alcanzará el 22% del PIB en 2050, frente al 20,8% de 2015, un incremento de 1,2 puntos porcentuales que se sitúa por debajo de la mediana de 3,7 puntos porcentuales estimada por la agencia para un grupo de 58 países analizados.

"Sin reformas fiscales o estructurales, la deuda neta de España podría aumentar de forma significativa desde el 91% de 2015 al 157,4% en 2050", estima la agencia, que alerta de que "los futuros costes presupuestarios del envejecimiento de la población no serán contenidos si medidas adicionales".

La calificadora de riesgos reconoce que "el reto no es algo único de España y todas las grandes sociedades industrializadas tendrán que abordarlo antes o después".

"Esperamos que la mayor parte del gasto relacionado con el envejecimiento en España vaya al abono de pensiones, seguido del gasto en cuidados sanitarios, incluso si estos últimos crecen a un ritmo más rápido a lo largo del horizonte proyectado", explica la agencia.

REFORMAS.

No obstante, la agencia considera "improbable" que los gobiernos permitan, como norma general, una espiral descontrolada de deuda y déficit, por lo que ven probable que las autoridades españolas introduzcan más medidas para contener el impacto presupuestario futuro del envejecimiento de la población.

En este sentido, S&P opina que la reforma de las pensiones adoptada por España en 2013 aún no ha dado todos sus frutos, aunque recomienda adoptar más medidas, incluyendo reducir el periodo de transición previsto para su implementación, menores exenciones relacionadas con las contribuciones sociales o introducir cambios en el sistema fiscal.

Asimismo, la agencia subraya la importancia del empleo para la evolución de las cuentas públicas y las consecuencias negativas del paro de larga duración, por lo que reclama reformas que permitan abordar los problemas del mercado laboral.

Aparte del empleo, S&P destaca el impulso que podría recibir la economía española si se acometen mejoras adicionales del entorno de negocio, incluyendo la mejora del funcionamiento del mercado de profesiones reguladas, así como de la educación o las políticas activas de empleo.