Gobierno venezolano anuncia distribución de 2 millones de teléfonos móviles

  • El Gobierno de Venezuela aseguró hoy que distribuirá en 2011 hasta dos millones de teléfonos móviles ensamblados en cinco modelos diferentes en fábricas de capital mixto chino-venezolanos, entre ellos, el conocido Vergatario II, anunciado por el presidente, Hugo Chávez.

Caracas, 15 ago.- El Gobierno de Venezuela aseguró hoy que distribuirá en 2011 hasta dos millones de teléfonos móviles ensamblados en cinco modelos diferentes en fábricas de capital mixto chino-venezolanos, entre ellos, el conocido Vergatario II, anunciado por el presidente, Hugo Chávez.

"En términos del Estado, estamos garantizando la distribución directa de dos millones de equipos al año", aseguró el ministro de Ciencia, Tecnología e Industria venezolano, Ricardo Menéndez, durante su visita a la fábrica donde se ensamblan los modelos de la empresa mixta chino-venezolana Orinoquia en Caracas.

El precio de los celulares oscilará entre los 31 y los 60 dólares y serán distribuidos por las empresas Orinoquia y Vtelca, ambas con participación de capital chino.

"Estamos dando un producto de mayor calidad a un precio más bajo", afirmó Menéndez, quien explicó que los modelos producidos por el Estado venezolano son equipos de "gama media" con un precio entre un 30 % y un 40 % por debajo de la media del mercado.

La unidad de producción de Orinoquia, inaugurada a mediados de 2010, ensambló el pasado año alrededor de 150.000 dispositivos, aunque en 2011 el Gobierno espera llegar a los 806.000, a los que se suman 1.200.000 producidos por Vtelca.

Venezuela tiene una demanda anual de telefonía móvil de unos 10 millones de aparatos.

Los celulares se comercializarán por la empresa de telefonía móvil estatal Movilnet y, según el ministro, 483.000 equipos ya esperan en el almacén para ser distribuidos.

El Gobierno venezolano anunció la semana pasada el lanzamiento del modelo Vergatario II, sucesor del fracasado Vergatario I, que fue anunciado como el móvil "más barato del mundo" por el propio Hugo Chávez, pero que nunca llegó a comercializarse.

El fracaso del modelo inicial fue admitido por Chávez que lo atribuyó a "trabas burocráticas".

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