Nadine Heredia vuelve al ojo del huracán tras renuncia del primer ministro

Carmen Jiménez

Lima, 25 feb.- La primera dama peruana, Nadine Heredia, vuelve a estar en el ojo del huracán político en Perú con la renuncia de César Villanueva como presidente del Consejo de Ministros que confirma, según la oposición, su influencia en el Ejecutivo.

El punto final a la polémica surgida a raíz de las declaraciones de César Villanueva sobre un eventual aumento del salario mínimo, que fueron desautorizadas tanto por Heredia como por el ministro de Economía, Luis Miguel Castilla, se puso ayer con la renuncia del cuarto primer ministro de Ollanta Humala en menos de tres años de mandato.

Desde hace meses se barajaba un nuevo cambio ministerial, pero la salida de Villanueva, que apenas llevaba cuatro meses al frente del Gabinete, se precipitó a raíz de sus desencuentros públicos con Heredia y Castilla sobre si estaba o no en estudio el aumento del salario mínimo, actualmente fijado en unos 270 dólares.

Humala aceptó ayer la renuncia de Villanueva y nombró a René Cornejo, como su quinto primer ministro en una amplia remodelación que afecta a siete carteras (Agricultura, Trabajo, Producción, Energía y Minas, Vivienda, Construcción y Saneamiento, Mujer, y Desarrollo e Inclusión Social) en las que apostó por la continuidad y por un perfil técnico.

Cornejo no es un hombre ajeno al Gobierno ya que se mantuvo hasta ayer como ministro de Vivienda desde el inicio del mandato de Humala.

El ministro de Economía, Luis Miguel Castilla, considerado una figura muy cercana a la primera dama, fue ratificado por Humala tras la polémica con Villanueva con lo que fortalece su posición en el Ejecutivo.

Aunque fueron las declaraciones de Castilla el domingo las que llevaron a la oposición a pedir la renuncia de Villanueva, el origen de la crisis fue la desautorización de Nadine Heredia.

Así lo reconoció anoche el propio Villanueva en una entrevista en el Canal N después de que ya se conocieran todos los cambios del Gabinete.

Villanueva recordó que la primera en corregirlo fue Nadine Heredia mientras el presidente Ollanta Humala estaba de gira en Oriente Medio al asegurar que el tema no estaba en discusión.

Estas palabras de la primera dama originaron las críticas de la oposición al considerarlas una intromisión en el Ejecutivo.

Villanueva agregó que tiene que haber una mayor institucionalizacion en los temas de gobierno porque en su caso no hubo respeto de los canales que corresponden al Ejecutivo, y señaló que el papel de Nadine es el de "primera dama, cada uno a su lugar".

Otro exprimer ministro de Humala, Oscar Valdes, también criticó en una entrevista que publica hoy El Comercio el papel de Nadine y aseguró que cree que "le hace mucho daño a la institucionalidad del país y eso le pasara factura al presidente Humala. Hay un exceso y un abuso de su posición de primera dama".

Y es que esta nueva polémica ha vuelto a poner sobre el tapete el debate en Perú sobre la figura de la primera dama que además es presidenta del Partido Nacionalista Peruano (PNP) y cuenta con una mayor aprobación que su esposo en las encuestas.

Heredia, que tiene una presencia permanente en las actividades oficiales del Ejecutivo, ha asegurado que defenderá tanto su derecho a cumplir actividades políticas partidarias como a mantener sus actividades como esposa del presidente y ha descartado un "poder paralelo" en el Palacio de Gobierno, repartido entre ella y el presidente.

Aunque Heredia ha repetido en varias ocasiones que no tiene intención de postular a la presidencia, cuando termine la gestión de su cónyuge en 2016, porque la ley electoral así se lo impide, un 66,8 % de peruanos cree que sí será candidata, según una reciente encuesta que le concede el segundo lugar en la intención de voto por detrás de Keiko Fujimori.