El partido de Llamazares dice que el 1-O es una consulta "de parte" que una izquierda federalista no puede reconocer

  • Izquierda Abierta, el partido integrado en Izquierda Unida y fundado entre otros por el excoordinador federal de la organización Gaspar Llamazares, ha emitido un comunicado ante la convocatoria del referéndum independentista del 1 de octubre para dejar claro su rechazo a lo que considera "una consulta de parte y sin garantías" que, remarca, "no puede ser reconocida ni apoyada desde una izquierda que defiende un Estado federal".
El partido de Llamazares dice que el 1-O es una consulta "de parte" que una izquierda federalista no puede reconocer
El partido de Llamazares dice que el 1-O es una consulta "de parte" que una izquierda federalista no puede reconocer
EUROPA PRESS
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"No es un referéndum ni tampoco una movilización sin más", subrayan desde Izquierda Abierta, incidiendo en que la consulta es "excluyente" porque sólo la propugnan los independentistas. "No se trata, por tanto de una movilización tan legítima y democrática como cualquier otra, se trata de un proceso (de)constituyente unilateral", apostilla.

Así las cosas, IA subraya que la izquierda "no puede convocar, participar o alertar" el referéndum del próximo 1-O pero tampoco sumarse "a la deriva de vetos y penalizaciones de la derecha". "Nuestra propuesta es clara: negociación política, participación democrática y federalismo", resume.

"SOBRAN CIRUJANOS EN POLÍTICA Y FALTA DIÁLOGO"

Y es que, según recalca, este tipo de convocatorias no acercan a la República ni al socialismo, sino que "más bien alejan el ideal integrador e igualitario de la República y divide a las fuerzas de la izquierda". "Los nacionalismos catalán y español se retroalimentan en detrimento del federalismo y de las clases populares", apostilla.

Izquierda Abierta defiende que el camino a seguir pasa "por denunciar la secesión unilateral y por apoyar el pacto político, el desarrollo federal y la consulta legal con garantías" porque su aspiración, dice, no es otra que "construir un nuevo marco de convivencia, más plural y federal mediante el diálogo y la consulta". "Lo uno sin lo otro es apostar por el enfrentamiento, la división y la amputación de España y de Cataluña", remacha.

Asimismo, esta corriente de izquierdas también manifiesta su total desacuerdo con las "tentaciones" de respuesta judicial y penal ante los retos que un asunto político demanda. "Sobran cirujanos en la política española y falta diálogo" -- defiende--. Entre la conllevanza orteguiana y el independentismo hay un amplio espacio para la política y el pluralismo, el pacto y la consulta".

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