Respuesta a la carta de Rajoy (¡y de papel, grrr!) que acabo de recibir en mi casa

Estimado presidente:

Acuso recibo de la carta que he encontrado en el buzón de mi casa. Al igual que su adversario Pedro Sánchez, su partido dispone de mi dirección particular, que yo no recuerdo haberle proporcionado.

Debo decir que al menos el PSOE encabeza su carta con mi nombre, Juan Bosco, y usted lo hace con un "estimada amiga, estimado amigo", para luego añadir que "es la única vez que podré dirigirme personalmente a cada uno de quienes tenéis la última palabra". Bueno, creo que esto que he recibido hoy es cualquier cosa menos una carta personal.

Intentaré resumir su misiva, que es larga, como usted mismo reconoce al final. Ha sido muy impertinente por su parte comenzar con un acto de conmiseración consigo mismo: "Tal vez no sepas lo difícil que ha sido para mí tomar las decisiones". Habría sido más elegante por su parte reconocer lo difícil que ha sido para los españoles soportarlas. Sobre todo porque dichas decisiones -recuérdelo bien- no estaban incluidas en su programa electoral.

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No quiera asemejarse a los más grandes villanos de la Historia, que han justificado toda suerte de barbaridades bajo la excusa de un bien mayor. No voy a analizar si el resultado merecía la pena o no. Sólo quiero remarcar que, entre todas las penas sufridas, no ha sido la suya la más importante como para que deba preceder en consideración a todas las demás.

"No he cumplido lo prometido, he tomado decisiones impopulares, he perjudicado tu poder adquisitivo y tu bienestar social, pero todo ha sido por tu bien. ¿No crees que deberías compadecerme por lo difícil que me ha resultado?". Podría haberlo escrito así y habría quedado más claro.También hay corrupción en otros partidos

Se ufana de que "hayamos superado la mayor crisis de nuestra historia reciente". Todo el mundo sabe que esa crisis puede haber desaparecido en las grandes cifras que usted maneja en Europa (y de cuya importancia yo no dudo) pero no en los pequeños números del día a día. Su insistente "ya no estamos en crisis" choca con la más evidente realidad de la inmensa mayoría de los españoles. Vuelvo a recordar a los villanos: una mentira repetida mil veces no se convierte en realidad.

Estoy sustancialmente de acuerdo con los tres párrafos que dedica a la importancia del empleo para garantizar el Estado del Bienestar. Creo que acierta en su diagnóstico y en su propuesta de Cataluña. Suscribo sus valoraciones sobre el terrorismo yihadista. Como ve, no me encuentro entre los que piensan que usted lo ha hecho todo mal.

En lo que sí ha fallado estrepitosamente, como quedó patente ayer en el debate, ha sido en la corrupción. Marra el disparo en su carta: "Tampoco me dedicaré a enumerar los casos de otros partidos porque sería decirte lo que ya sabes". Hombre, estaría bueno que en una carta "personal" para pedirme el voto se rasgase usted las vestiduras con los EREs de Andalucía o las andanzas de la familia Pujol.

"Nos equivocamos (...) dando nuestra confianza a personas que no la merecían, y no hay día que no lo lamente. Pero, por fortuna, todos ellos están ya fuera de la vida pública y ya no pueden hacer más daño".

No, señor Rajoy. O no se entera o no quiere enterarse. Entre los supuestos perceptores de dinero negro se encuentrancompañeros suyos que siguen en política. Entre ellos, usted mismo. No, yo no le voy a acusar de ser un político indecente, como hizo Pedro Sánchez. Sólo constato que usted no es consciente (o no quiere serlo) de la gravedad del caso Bárcenas, sobre todo en lo que le afecta a su persona. Y que, por tanto, no creo que sus 70 medidas contra la corrupción puedan airear el pestilente clima que reina en los despachos de su partido.Soy malo, pero los otros peores

Lo que más me ha gustado de su carta es el final, cuando expone las razones para solicitar su voto: "Sé que es probable que no pensemos lo mismo en algunas cosas. Pero no es necesario que pensemos igual en todo para que nos votes. Solo que creas que somos la mejor opción".

Este sí que ha sido un comentario "ruiz", señor Rajoy. No sé qué mezquino y miserable de estas frases: si el concepto que revela de las personas a las que usted se dirige o el panorama que les ofrece. Vuelvo a traducir sus palabras: "No importa si nuestra gestión te ha convencido o no, ni siquiera si nuestras propuestas te ilusionan. Sólo mira a tu alrededor: ¿vas a confiar en los socialistas que nos hundieron, en un 'naranjito' que parece salido de la universidad o en un perroflauta con coleta? Sí, es probable que nosotros seamos malos, pero los otros son mucho peores".

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Le hago una profecía similar a que usted dirigió anoche a Pedro Sánchez: probablemente usted ganará las elecciones. Pero cuando en la noche del 20D compruebe que ha obtenido los peores resultados del Partido Popular desde 1989, piense si usted y su forma de ser no tienen mucho que ver con ello.

Y obre en consecuencia, antes de que "naranjito" le obligue.

PD: No me envíe más propaganda electoral. Cuelgue su carta en la página web de su PP y ya la leeré si estoy de ánimo. No gaste papel. Y devuelva al Esado el dinero que ahorre. Compensará algo, aunque solo sea simbólicamente, sus constantes recortes.

Sigue @martinalgarra