Sancho Panza abandona al Quijote. Jorge Moragas (Barcelona, 1965) se marcha de la vera de Mariano Rajoy tras quince años a su lado, viviendo con él tanto las victorias de 2011 y 2015-2016, como las duras derrotas de 2004 y 2008 frente a José Luis Rodríguez Zapatero. El que ha sido jefe de gabinete del presidente del Gobierno pone rumbo a Nueva York para convertirse en embajador en la ONU. Sale del Ejecutivo con la intención de alejarse de la política activa, en un momento de debilidad para el Gobierno y tras haber estado detrás de la campaña de las elecciones catalanas que han vuelto a dar la victoria al bloque independentista. En el Gobierno y en el PP tenía algunos enemigos, algunos sentados cerca muy cerca de él.
"Algunos quieren empezar a colocarse antes de que Rajoy deje La Moncloa". Así responde una fuente cercana a presidencia del Gobierno cuando es preguntada por los motivos que han llevado a Moragas a salir de España para representar a nuestro país en Naciones Unidas, donde precisamente el fiel escudero de Rajoy pasó seis meses, tras estudiar Derecho en Barcelona y antes de aprobar la oposición a la carrera diplomática. Las mismas fuentes enmarcan la salida del jefe de gabinete de Rajoy en clave sucesoria del presidente, consciente de que el relevo podría producirse a corto o medio plazo (aunque él diga que se encuentra en forma para continuar). La decisión está solo en manos del gallego y pocos la conocerán antes.
El catalán le pidió al presidente hace ahora un año que quería dar un giro a su vida profesional y personal y ambos decidieron que lo mejor era sustituir a Román Oyarzun en Manhattan. No obstante, acordaron hacerlo público hacia finales de año, pero el órdago independentista y la aplicación del artículo 155 provocó que el anuncio se retrasara al día después de las catalanas. Moragas se marcha a Nueva York junto a su familia, con la que se había mudado a Madrid en la pasada legislatura y con la intención de pasar los próximos cuatro años allí. En el Gobierno no olvidan que él siempre aspiró, por formación, a ser ministro de Exteriores pero Rajoy nunca le premió con un puesto en el consejo de ministros.
El gabinete de Moragas, por cierto, había sufrido algunos cambios en los últimos meses con varios de sus asesores que han ido poniendo rumbo a diferentes destinos fuera de La Moncloa. El primero en salir fue José Sánchez Arce, que había sido el responsable del famoso proyecto de "unidad de mensaje". Moragas le empoderó para que coordinará toda la estrategia comunicativa del PP de cara a las últimas generales. Cuando Rajoy fue investido Sánchez Arce puso rumbó al Ministerio de Defensa. Asimismo, ha habido cambios en la asesoría 'personal' de Rajoy, con la salida de Jaime González Castaño, su 'chico del maletín', hacia el CSD y el ascenso de Sergio Ramos. En el equipo de discursos ha ganado peso la diputada Pilar Marcos, que fue periodista de El País.
Para entender la salida de Jorge Moragas del núcleo duro del marianismo también hay que mirar a Cataluña. El ya exjefe de gabinete del presidente es uno de los principales responsables de la estrategia que ha seguido el Gobierno en los últimos años, apostando primero por el diálogo y después por una campaña en clave nacional que no ha dado los resultados que esperaban en Moncloa. Moragas participó en el diseño de la fracasada 'Operación Diálogo', que consistió en el desplazamiento a Cataluña de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. También participó en el diseño de la estrategia para el 21-D y pensó que lo mejor era realizar mítines en clave nacional, con una participación activa de Rajoy. Moragas sabía que los catalanes votan diferente en autónomicas y en generales y pensó que también lo harían en esta ocasión. Él mismo asume que se equivocó.
Moragas también se ha granjeado a lo largo de su carrera junto a Rajoy a grandes enemigos. Algunos en el PP creen que él es el responsable de que el presidente se encierre en Moncloa y solo salga del palacio presidencial en épocas electorales. En el Gobierno también recuerdan los roces que ha tenido con Carmen Martínez Castro, secretaria de Estado de Comunicación y máxima responsable de la estrategia mediática. Se ha producido más de un encontronazo entre ambos escuderos sobre si Rajoy debía comparecer ante los periodistas o mejor debía permanecer en la sombra y ser otro miembro del Gobierno quien diera la cara. Por este motivo la salida de Moragas de Moncloa ha sido interpretada por algunos como una victoria de Martínez Castro.
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