LIBERADOS LOS PERIODISTAS SECUESTRADOS EN MACEDONIA

Los 80 periodistas detenidos este lunes en Macedonia, entre los que figuraban cinco españoles, fueron liberados este martes, según ha informado Reporteros Sin Fronteras.
Los periodistas han tenido que abonar una “multa” de 260 euros para su liberación y les ha sido prohibida su entrada en territorio macedonio durante seis meses.
“Acogemos con alivio la liberación de los periodistas españoles detenidos en Macedonia, pero insistimos en denunciar las dificultades que afrontan para dar cobertura a la situación inhumana en la que se encuentran, especialmente en el campamento griego de Idomeni, donde se hacinan cerca de 20.000 personas en condiciones insalubres y contrarias a todos los derechos humanos", declaró Malén Aznárez, presidenta de Reporteros sin Fronteras España. "La presencia de periodistas en todas las zonas donde llegan, se asientan y desplazan los refugiados sirios es la única voz con la que cuentan para concienciar a la comunidad internacional del drama que están sufriendo. Si no fuera por la cobertura periodística del éxodo sirio, ésta sería una tragedia ignorada por la Unión Europea, cuya pasividad no deja de escandalizarnos”.
Los 80 informadores fueron detenidos este lunes cuando cubrían el paso de miles de refugiados sirios desde el campamento de Idomeni, en la frontera norte de Grecia, hacia territorio macedonio.
Los cinco periodistas españoles detenidos son Javier Bauluz (fundador y director de 'Periodismo Humano' y premio Pulitzer 1995), Ane Irazabal (periodista freelance y colaboradora en la zona de la cadena vasca de televisión ETB), Mikel Konate (videperiodista freelance), Alberto Sicilia (colaborador en la zona de La Sexta y 'Público') y Mariano Burattini (videoperiodista y reportero freelance). Los cinco fueron detenidos por militares del ejército macedonio y conducidos a la comisaría de Gevgelija, donde permanecieron retenidos aproximadamente 13 horas. La periodista de laSexta Elena Herreros, que en un principio se creyó también detenida, fue interceptada por el ejército macedonio y 'devuelta en caliente', junto a decenas de refugiados, a territorio griego.