REFUGIADOS. ACCIÓN CONTRA EL HAMBRE PIDE A EUROPA QUE UNIFIQUE EL ESTATUTO DEL REFUGIADO

- Porque crisis como la de Siria se repetirán en otro lugares. El director general de Acción contra el Hambre, Olivier Longué, subrayó este lunes que la solución a la crisis humanitaria de los refugiados que quieren llegar a Europa pasa por que los Estados consensuen un Estatuto del Refugiado. En su opinión, el conflicto sirio “no marca un antes y un después”, pues existen millones de personas que huyen de guerras que continúan “enquistadas” en todo el mundo.
“Hay una relación entre el flujo de refugiados y ayuda humanitaria. La crisis siria no marca un antes y un después. El mundo es global, para bien y para mal. Los refugiados no se enclavan en una zona geográfica”, dijo en un encuentro informativo celebrado en Madrid, en el que destacó que tras las alambradas de quienes quieren buscarse un futuro mejor en Europa también hay afganos, iraquíes y eritreos.
Además, esta organización ha comprobado que en el 80% de los 50 países en los que trabaja hay conflictos “enquistados” que duran más de 10 años, lo que ha provocado “crisis estructurales”. “Lo que pasa con Siria volverá a pasar en el mundo globalizado en el que nos movemos”, aseveró.
FALTAN OPORTUNIDADES
Desde la perspectiva de Longué, los sirios se dirigen a Francia y Alemania porque en el resto de países europeos, como España, “faltan oportunidades” para rehacer su vida.
Según datos de Acción contra el Hambre, la crisis siria arroja cifras como que 12,2 millones de personas necesitan ayuda urgente; 4,1 millones han abandonado el país y otros 6,6 son desplazados internos. Todo ello, teniendo en cuenta que antes del comienzo de la guerra, hace un lustro, el país sobrepasaba los 20 millones de habitantes, la mayoría de "renta media".
Longué también aprovechó para denunciar el “cierto cinismo” de Europa, que está “por debajo de la realidad del horror del conflicto”, como se está comprobando sobre el terreno cada vez que se ha podido acceder a las ciudades sirias sitiadas.
LOS GRANDES PROBLEMAS
Olivier Longué advirtió de que “el primer problema” está en Grecia, que no tiene capacidad “para absorber” refugiados “tras el desmantelamiento social que ha vivido” por la crisis económica, y que la Unión Europea, más que un presupuesto de 700 millones por declarar el país heleno "zona catastrófica", debería “movilizar gente” para ayudar a los sirios bloqueados allí.
Pero también dijo que “el gran problema” al que se tendrán que enfrentar los mandatarios europeos que se reúnen este lunes es “dónde vamos a colocar los campos de refugiados”, en un contexto en el que la “extrema derecha tóxica” presiona en países como Francia y Holanda para no tomar protagonismo para solucionar la crisis y “Merkel está muy sola”.
“Piensan que una vez solucionado Siria no va a haber más problemas. No se ha aprobado un plan, sino un presupuesto, lo que significa que los políticos están en pánico”, aseveró, mientras países limítrofes a Siria “están haciendo los deberes” en la parte “humanitaria”.
De hecho, Turquía, quien según Longué tiene muchas opciones de albergar campos de refugiados por acuerdo europeo, da acceso a la educación y a la sanidad a los 2,4 millones de sirios que hay en su territorio, muchos de los cuales están acogidos directamente en hogares turcos.
TERRIBLE INICIO DE AÑO
Mientras los políticos debaten cómo afrontar la crisis, el director de Acción contra el Hambre recalcó que en lo que va de año ha habido “un incremento terrible” de mujeres y niños entre los refugiados, que el 80% de los sirios (unos 18 millones) no tienen cobertura básica de bebida, comida y un techo y que las ONG sólo han recibido el 56% de los fondos necesarios para dar un apoyo a esas necesidades básicas.
Pero pronosticó que si el acuerdo de paz en Siria no se prolonga demasiado, “la gente volvería rápido”, pues “por muy devastada que esté, su vida está allí”. Y comparó la situación con la que vivió Bosnia en los años 90 del siglo pasado, donde sólo el 5% de la gente no regresó a su lugar de origen.

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