Cómo ahorrar más de 300 euros de combustible al año en tu coche

  • Medidas tan sencillas como conducir con marchas largas o arrancar el motor sin pisar el acelerador te permitirán ahorrar a final de mes
Atasco en la A-1
Atasco en la A-1
EFE

No pises el acelerador, pero tampoco levantes el pie

Correr al volante es uno de los factores de conducción que más influye en el consumo de combustible. Por norma general, el gasto de diésel y de gasolina aumenta en función del incremento de velocidad elevado al cuadrado. Es decir, por cada 20km/h gastas un 44% más de carburante.

Así, pasar de 110km/h a 130km/h en un coche diésel supone pasar de consumir 6l/100km a 8,64l/100km. Para hacer frente a esta demanda de consumo habría que llenar el depósito del automóvil 36 veces al año, una inversión de 715 euros por encima de la media.

El gasto es aún mayor en un coche de gasolina. Circulando por encima de los 100 km/h, un incremento de velocidad de 20 km/h hace que el consumo de combustible pase de 8l/100km a 11,5l/100km. Habría que gastar casi mil euros más en gasolina cada año.

Cuando se superan los 100km/h hay que procurar mantener la velocidad lo más uniforme posible. Así se consigue reducir el consumo tanto de diésel como de gasolina lo máximo posible. Una curiosidad: circulando a más de 20km/h con una marcha metida el consumo es nulo.

Circula sin baca

Conducir con el equipaje cargado encima del coche aumenta el consumo de combustible un 35%. El perfil aerodinámico del coche aumenta, y el motor tiene que hacer un mayor esfuerzo por vencer la resistencia del aire. “A partir de los 60-70 km/h los efectos de la aerodinámica se notan el consumo” dice Francisco Javier Jiménez, profesor del Grupo de Máquinas y Motores Térmicos de Sevilla. “El gasto se multiplica”.

En un vehículo diésel, el consumo de carburante pasa de 6l/100km a 8,1litros/100km. El gasóleo se gasta más rápido y hay que llenar el depósito más veces. Conduciendo con el equipaje montado sobre la baca todos los días habría que pasar por la gasolinera 33 veces al año. Esto supondría un gasto anual extra de 520 euros.

En un coche de gasolina el gasto es aún mayor, ya que consume más y el carburante es más caro. Se pasa de gastar 8l/100km a 10,8l/100km. Se tendría que pasar por la gasolinera 43 veces al año, lo que implica un gasto extra de 759 euros.

Conduce con marchas largas siempre que puedas

Coger el coche para realizar un desplazamiento corto o conducir por ciudad puede salirte muy caro. En este tipo de viajes se suele conducir el automóvil con marchas cortas, lo que provoca que el consumo de combustible aumente hasta un 18%

Si tu automóvil funciona con diésel, cogerlo todos los días para conducir por ciudad o ir a comprar el pan puede costarte hasta 292 euros más caro al año, ya que tendrías que llenar el depósito casi 30 veces al año, 5 más que la media.

Si por el contrario conduces un gasolina, acusarás el gasto aún más. Tendrás que destinar 340 euros más de forma anual para hacer frente a las 37 veces que tendrías que pasar por la gasolinera de media.

Si no tienes más remedio que moverte en coche en estas circunstacias, sigue las siguientes recomendaciones para optimizar el consumo de combustible:

-Pasa a 2ª marcha a los dos segundos de hincar la marcha o tras recorrer 6 metros.

-Pasa a 3ª marcha a partir de los 30km/h

-Pasa a 4ª a partir de los 40km/h.

-Pasa a 5ª a partir de de los 50 km/h.

Si tu vehículo es diésel, conduce siempre entre 1.500 y 2.000 revoluciones. Si es gasolina entre 2.000 y 2.500.

Mantén el motor siempre a punto

El motor es una de las piezas más importantes de un coche. Si no funciona bien el vehículo tampoco lo hará. Mantenerlo en buen estado es importante para el bolsillo, ya que optimiza el consumo de carburante. Una planta motriz en mal estado gasta hasta un 9% más de combustible.

En un diésel, el gasto extra anual conduciendo con un motor en mal estado es sitúa en los 135 euros, dos tanques de combustible más. En un automóvil que funciona con gasolina el derroche de dinero es aún mayor: 192 euros de más al año, casi tres depósitos de más.

El correcto mantenimiento de un motor implica pasar las revisiones anuales en el taller, la ITV, cambiar el aceite siguiendo las recomendaciones del fabricante, sustituir los filtros del aire, etc. La Asociación Española de Fabricantes de Coches y Camiones (ANFAC) sostiene que “llevar un buen mantenimiento del vehículo siguiendo las instrucciones del fabricante significa ahorrar combustible”

En ralentí, apaga el motor transcurrido un minuto

Conducir por ciudad o en un atasco supone un mayor consumo de carburante. Por una parte porque se circula con marchas cortas y revoluciones elevadas. Como ya se ha explicado en el paso número tres de este practicograma, esto hace que el coche gaste un 35% más de combustible. Y por otra porque el motor pasa mucho rato en ralentí.

En estas condiciones la recomendación es apagar el automóvil a los 60 segundos, ya que de lo contrario el consumo de combustible se sitúa en 0,5l por hora, es decir, aumenta un 8,3%.

Conduciendo todos los días por ciudad o por embotellamientos, esto supone un gasto extra de 135 euros en un vehículo diésel y de 138 en uno de gasolina.

Mantén una temperatura uniforma en el interior del coche

Por mucho calor que haga durante la época estival, evita usar el aire acondicionado sin control, ya que aumenta el consumo de carburante en un 20%. Un coche diésel gasta, de media, 6 depósitos cada 3 meses. Conduciendo con el aire acondicionado durante todo el trimestre que dura el verano, se consumirían 7,5 depósitos, para lo que haría falta gastar 97 euros más.

Si tu coche funciona con gasolina el gasto es todavía mayor. Tendrás que destinar 124 euros de más para hacer frente a los casi 10 depósitos que consumirás a lo largo del verano (conduciendo sin el aire acondicionado sólo tendrías que repostar 8 veces).

Una alternativa es conducir con las ventanillas bajadas, aunque esto también aumenta el consumo de combustible. Lo hace en un 5%. En un automóvil que funciona con diésel, el gasto será de 39 euros más a lo largo de todo el verano. En un gasolina el incremento será de 41 euros.

Si no tienes más remedio que utilizar el aire acondicionado, mantén una temperatura estable de 23-24 ºC en el interior del coche. Alcanzarás una sensación térmica agradable y optimizarás el gasto de combustible.

Lleva los neumáticos a la presión indicada

Llevar los neumáticos por debajo de la presión indicada hace que se consuma hasta un 3% más de carburante. Aumenta la superficie de rodadura de la rueda, y esto hace que se genere más resistencia al avance. La presión correcta la establece el fabricante, pero suele rondar los 0,3 bares.

Por debajo de esta medida, llenar el depósito de un coche diésel te puede costar 48 euros más al año. En el caso de un gasolina, 66 euros más.

Pero circulando con una presión adecuada en las ruedas no sólo ahorras en gasolina, también en neumáticos, ya que se gastan más lentamente. Los fabricantes recomiendan cambiar el caucho de las ruedas cada año o cuando la marca de rodadura marque menos de 1,6 mm. Por debajo de los 0,3 bares el desgaste se duplica y hará falta hacerlo por lo menos dos veces cada 12 meses. El resultado es que en lugar te pagar 150-200 euros por cada eje (los neumáticos se cambian de dos en dos), tendrás que gastar 300-400 euros.

¿Diésel o gasolina?

A la hora de comprar un vehículo, elegir entre un diésel o un gasolina puede suponer una medida de ahorro. Para que esto sea así hay que saber de antemano cuál es el uso que se le va a dar al vehículo.

En líneas generales, un modelo diésel consume menos que un gasolina, pero también suele ser más caro que un gasolina. Conduciendo una media de 15.000km al año, unos 40km cada día, se empezaría a rentabilizar la compra de un coche de gasoil tras haber conducido 250.000km, es decir, a los 15 años.

Si la vas a dar mucho uso a tu coche (más de 40km al día) te rentará comprar un diésel. De lo contrario te saldrá más económico un gasolina.

Pero hay más factores. Suele resultar más caro asegurar un diésel, y las reparaciones también son más costosas. Estos automóviles, sin embargo, se devalúan menos con el paso de los años, y se venden mejor en el mercado de segunda mano.

Los datos del reportaje

Los cálculos de este reportaje han sido realizados en base a los siguientes datos:

-Precios de combustible de enero de 2011 (litro de diésel 1,187 euros; litro de gasolina: 1,256 euros).

-Consumo medio de un coche diésel: 6l/100km.

-Consumo medio de un coche gasolina: 8l/100km.

-Depósitos consumidos por un diésel al año: 25.

-Depósitos consumidos por un gasolina al año: 32.

-Capacidad media del depósito de un automóvil: 55l.

-Gasto anual medio en diésel: 1625 euros.

-Gasto anual medio en gasolina: 2210 euros.

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