La enfermedad, "mayor de lo esperado" teniendo en cuenta la edad del príncipe --83 años--, implica "cambios en el comportamiento, en los patrones de reacción, de juicio, y en la vida emocional", por lo que podría "afectar a la interacción (del consorte) con el mundo exterior".
Por este motivo, la Casa Real ha anunciado en su comunicado que Enrique "reducirá aún más sus actividades futuras" y espera que el marido de la reina pueda tener "la paz y la tranquilidad que se requiere dada la situación".
El anuncio de la enfermedad ha llegado apenas unas semanas después de que el esposo de Margarita confirmase que no quería ser enterrado junto a su mujer por sentirse relegado durante décadas. Una de las frustraciones de Enrique ha sido no poder ostentar el título de rey, habiéndose quedado únicamente en príncipe.
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