Su compañero de patrulla, un joven agente en prácticas de unos 30 años que viajaba como copiloto, ha logrado salir del vehículo y ha sido rescatado en el agua por otros agentes.
El hombre, que padece Alzheimer, ha sido trasladado al hospital para practicarle un chequeo médico.
Además, parece que se han producido destrozos en la hostelería, con denuncia de los propietarios. En ese caso "habría diligencias penales por daños".
La Ertzaintza no podía acceder a la hospedería por las limitaciones legales al tratarse de una falta, por la que no pueden acceder a una propiedad privada sin una orden judicial.
Junto a ella, fue arrestado también un hombre, expareja de esta mujer, y que permanece en dependencias policiales a la espera de comparecer ante el juez.
Agentes de la Ertzaintza han encontrado estos restos humanos junto a unas antenas en el monte Rontegi durante unas labores de búsqueda de un vecino de Barakaldo al que no ven desde junio.
El Departamento de Seguridad dice que el sospechoso "no consta expediente policial previo sobre delitos de violencia genero o violencia doméstica".
El siniestro se ha producido sobre las cinco de la tarde y la mujer ha quedado tendida en la calle, inconsciente, mientras que el motorista abandonaba su vehículo y huía del lugar a la carrera.
El presidente de Voz anunció pintadas y cristales rotas del establecimiento que su familia tiene en la localidad vasca y recuerda que no es tan fácil romper nada porque están blindadas desde 1999 por ETA.
La Delegación del Gobierno en La Rioja informa de siete agentes heridos y al menos seis detenidos después de que una marcha de negacionistas derivase en una batalla campal contra la Policía.
El automóvil se ha salido de la calzada y ha colisionado contra un muro, según han informado fuentes de la Federación navarra de Automovilismo.
Dos de ellos son Jon Zubiaurre, condenado por el asesinato de un ertzaina en 2001, y Liher Aretxabaleta, por un atentado en Madrid con 45 heridos.
En un primer momento, las redes sociales se volcaron en críticas a la mujer, pero en seguida el madrileño empezó a recibir insultos y acusaciones de "chivato".
Un particular ha alertado a la Ertzaintza de que una mujer, que había dado positivo en coronavirus, estaba en una playa donostiarra en lugar de estar confinada en su casa.
En la ciudad castellano-leonesa se intervinieron 300 unidades falsas de reproducciones de billetes de 5, 10, 20 y 50 euros y fueron detenidas cuatro de las cinco personas.
Fuentes del departamento vasco de Seguridad han informado de que las detenciones se han llevado a cabo esta mañana por orden del juez de Durango (Bizkaia), que investiga el colapso de la escombrera.
El juzgado de Instrucción número 4 de la ciudad ha resuelto que las pruebas contradicen a la denunciante, que denunció un delito grupal.
Sobre las 4.00 horas, los responsables de una discoteca situada en la Plaza San Antón de la capital alavesa solicitaron la presencia policial.
Pese al dispositivo de la Ertzaintza para mantener la seguridad, se registraron incidentes en las calles cercanas, donde los radicales cruzaron y dieron fuego a contenedores, con varias cargas policiales.
El acto se ha llevado a cabo en Irún en un ambiente plagado de insultos y gritos pese a un fuerte dispositivo policial que ha evitado que los manifestantes accedan al lugar.
El lanzamiento se produjo por parte de uno de los manifestantes para tratar de torpedear un acto del partido en el que estaban participando varios representantes de la formación.
La investigación localizó un pabellón habilitado como residencia y prostíbulo en Rekalde y otra vivienda en el barrio de Lasearre de Barakaldo donde se establecía el grupo organizado.
La investigación vincula "las actuaciones irregulares" con el derrumbe de la escombrera el pasado 6 de febrero, desde cuando dos trabajadores permanecen sepultados bajo toneladas de escombros.
El TSJPV dice que omitió "total o parcialmente" medidas de protección laboral ante la Covid y esa conducta generó "un peligro grave para la salud".
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