España, el décimo país que más aumentó su ayuda al desarrollo en 2013

España fue en 2013 el décimo país que más incrementó su financiación a la ayuda al desarrollo de los países más pobres del planeta (un 3,7%), debido a las condonaciones de deuda en países del África subsahariana, cuando la cooperación mundial se elevó en términos globales en un 6,1%, después de dos años de caídas y a pesar de los recortes en los presupuestos nacionales por la crisis económica mundial.
Así se desprende de los datos dados a conocer este martes por el Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que agrupa a los 28 principales países donantes del mundo, más la Comisión Europea.
Según estos datos preliminares, a los que tuvo acceso Servimedia, la ayuda al desarrollo en 2013 se elevó a 134.800 millones de dólares (unos 97.740 millones de euros), lo que supone el 0,30% del PIB de los países más ricos, un incremento del 6,1% respecto a 2012 y un nuevo récord histórico nunca alcanzado antes.
Diecisiete de los 28 países del CAD aumentaron su ayuda oficial al desarrollo neta en 2013, mientras que 11 la disminuyeron. Los donantes con los mayores incrementos fueron Japón (36,6%), Reino Unido (27,8%), Islandia (27,4%), Noruega (16,4%), Italia (13,4%), Polonia (8,6%), Corea del Sur (4,8%), Dinamarca (3,8%) y España (3,7%). Por el contrario, las mayores caídas corresponden a Portugal (-20,4%), Canadá (-11,4%) y Francia (-9,8%).
Estados Unidos se mantuvo como el país más solidario con las naciones más pobres del mundo, al destinar el año pasado 31.545 millones de dólares (22.860 millones de euros) a ayuda oficial al desarrollo.
A Estados Unidos le siguen Reino Unido (12.960 millones de euros), Alemania (10.190), Japón (8.540) y Francia (8.240), en tanto que España se sitúa en la decimoquinta posición, con alrededor de 1.590 millones de euros.
En cuanto al porcentaje del PIB, España pierde más puestos, ya que se coloca en el 22º lugar, con un 0,16%, sólo por delante de Corea del Sur, Eslovenia y Grecia (0,13%); República Checa (0,11%), Polonia (0,10%) y Eslovaquia (0,09%).
Los países del G-7 proporcionaron el 70% del total de la ayuda oficial al desarrollo neta, en tanto que los Estados de la UE alcanzaron el 52%.
CRÍTICA DE LAS ONG ESPAÑOLAS
Por otra parte, la Coordinadora de ONG para el Desarrollo España (Congde) lamentó, en un comunicado, que España siga “a la cola mundial en cooperación” porque el porcentaje del PIB se mantuvo en el 0,16%, igual que en 2012 y “a niveles de inicios de los años 90”.
“Con esta cifra, podemos denunciar que los compromisos asumidos internacionalmente se incumplen de manera sistemática. España sigue sin ser coherente con la voluntad expresada en la candidatura al Consejo de Seguridad de las Naciones unidas de ser un actor global relevante”, añadió.
La Congde alertó sobre “el gravísimo impacto” que estos datos tendrán sobre las acciones que España desarrolla en materia en materia de cooperación internacional. “Las consecuencias sobre la vida de miles de personas serán enormes”, apostilló.
AUMENTO DEL 2,4% PARA 2014
La OCDE señala que la ayuda a los países en desarrollo creció de forma sostenida desde 1997 hasta 2010, para descender en 2011 y 2012, ya que muchos gobiernos tomaron medidas de austeridad y recortaron los presupuestos en este capítulo.
El secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, consideró “alentador” que los gobiernos incrementen sus presupuestos de ayuda al desarrollo, “a pesar de las limitaciones financieras con las que se enfrentan en la actualidad”, pero tildó de “preocupación seria” que la asistencia a algunos de los países más necesitados continúe cayendo.
Así, la ayuda al desarrollo bilateral a África cayó un 4%, mientras que la destinada a los países menos adelantados se incremento en un 12,3%.
Por otro lado, una encuesta realizada por el CAD a los países donantes revela que los niveles de ayuda al desarrollo podrían aumentar de nuevo en 2014, concretamente un 2,4%, y a estabilizarse a partir de entonces, aunque continuará la tendencia a la caída destinada a socorrer a los países del África subsahariana.