Cómo convertirse en coleccionista de arte por correo electrónico

  • 'Un mensaje para Anabel' es un proyecto artístico de Juan Carlos Bracho que se desarrollará a lo largo de todo este año en Internet y que convierte a los espectadores en coleccionistas y artistas de una obra de arte en edición ilimitada.
Un mensaje para Anabel
Un mensaje para Anabel
lainformacion.com
Alessia Cisternino

Una obra de arte compuesta por cuarenta y cinco piezas que llegan una por una por correo electrónico y un número infinito de participantes que tienen delante de sí todo un año para convertirse en coleccionistas de arte e incluso en artistas.

Más parecido a un juego que a un proyecto artístico en un sentido tradicional, Un mensaje para Anabel es una exposición que se desarrolla a partir de hoy dentro de las paredes del Museo ABC de Madrid – tomando como punto de arranque dos obras, una de los fondos del museo y otra de la Colección Santander – pero sobre todo fuera: en el espacio más o menos infinito de la web.

Juan Carlos Bracho es el autor de este proyecto que convierte por primera vez las pruebas multipágina que forman parte de su metodología de trabajo – es decir los bocetos en tamaño real de sus obras – en obras de arte en sí mismas.

El título del proyecto alude a una promesa que Bracho hizo hace tiempo a su compañera de estudios y amiga Anabel – residente en Bélgica– de enviarle por mail una de sus pruebas multipágina. Como no mantuvo esta promesa, ahora dedica a Anabel este proyecto y la convierte en el destinatario real de un número potencialmente infinito de destinatarios.

Una obra de arte a medida

Suscribiéndose a la web de Un mensaje para Anabel, el espectador recibe cada día durante cuarenta y cinco días un trozo de la obra completa. Una vez acabada, sólo tendrá que imprimirla y pegarla siguiendo las instrucciones o, si así prefiere, más bien ignorándolas, dando inicio así a un nuevo proceso creativo.

"Lo que he hecho es darle una vuelta de tuerca a la red porque utilizo un proceso de captación superlenta de la imagen en un medio que es el símbolo de la inmediatez" explica Juan Carlos Bracho. "He dado una vuelta de tuerca también a la relación que establece el usuario con la web: si normalmente tarda un segundo en bajarse una imagen, aquí tiene que esperar cuarenta y cinco días".

La pieza no sólo se puede montar de maneras diferentes, sino que su formato original de 110 x 145 cm se puede reducir o estirar según las preferencias y las exigencias personales.

"Las instrucciones se refieren al modelo ortodoxo del multipágina, pero invitamos a que la gente haga su propia versión. Le damos un modelo para que genere el suyo propio" afirma Bracho que se declara encantado con que los espectadores interpreten a su manera la obra que él ha creado. "Cuando tú adquieres una obra de arte puedes hacer con ella lo que quieras, es tuya".

A pesar de que la obra es gratuita y su edición ilimitada, al final de este proceso de creación multimedia, cada participante tiene derecho a un certificado nominal con la numeración de la copia que ha recibido. También puede reenviar la obra a todas las personas que desee en una cadena infinita en la que cada uno crea, realiza, expone y disfruta de una obra de arte a medida.

Mostrar comentarios