Equipo del CSIC estudiará sobre el terreno la pérdida de hielo en el Ártico

  • Un equipo internacional de investigadores, liderados por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), viajará al mar de Chuckchi, una de las zonas más sensibles del océano Ártico, para profundizar en los fenómenos que están disminuyendo la superficie de hielo marino.

Madrid, 21 jul.- Un equipo internacional de investigadores, liderados por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), viajará al mar de Chuckchi, una de las zonas más sensibles del océano Ártico, para profundizar en los fenómenos que están disminuyendo la superficie de hielo marino.

La expedición al Ártico forma parte del proyecto europeo SATICE, durará dos semanas (del 2 al 15 de agosto) y tendrá lugar a bordo del rompehielos surcoreano Araon, ha informado el CSIC en un comunicado.

El equipo partirá el próximo 28 de julio desde la ciudad de Nome (Alaska, Estados Unidos) y estará liderado por el investigador del CSIC en el Instituto de Ciencias del Espacio y de la Unidad de Tecnología Marina Pedro Elósegui.

El mar de Chuckchi se sitúa al norte del estrecho de Bering, entre Estados Unidos y Rusia, justo en el comienzo del océano Ártico, y ha despertado el interés de investigadores internacionales porque supone la frontera entre el hielo marino permanente y el océano abierto.

En esta región, el mar solía estar cubierto de hielo de forma permanente durante el verano boreal, pero en la actualidad sólo lo alberga de forma parcial, según Elosegui.

"Esta región del Ártico sufre una pérdida catastrófica de volumen de hielo marino y actualmente centra las investigaciones de varios programas internacionales", ha explicado.

En su opinión, la observación del mar de Chuchki es clave para comprender el proceso de pérdida de hielo marino en el Ártico y predecir su evolución en otras zonas de este océano en el futuro.

Entre los objetivos específicos de esta fase de la investigación figura el estudio de varios fenómenos que contribuyen a la pérdida de hielo marino, como el impacto de las mareas oceánicas, las olas y las tormentas atmosféricas.

Para ello, los científicos del CSIC utilizarán una red compuesta de boyas GPS polares, que recopilarán datos de forma continua mientras flotan a la deriva sobre el mar helado, y los enviarán por satélite en tiempo real a un ordenador.

Asimismo, el equipo intentará medir el grosor del hielo y el nivel del mar desde un rompehielos con el objetivo de cartografiar el estado de esta superficie helada.

Mostrar comentarios