Los creacionistas abrazan el negacionismo climático para asaltar las escuelas

  • Los enemigos de Darwin tratan de socavar las teorías científicas en varios frentes, con el objetivo de que Creación y Evolución se enseñen en igualdad de condiciones. Negar el cambio climático les resulta una buena coartada para sembrar la duda y la confusión.
Viñeta: Bizarro.com
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Llevan décadas tratando de que la Evolución no se enseñe en los colegios, o que se explique junto con el Diseño Inteligente de manos de un Creador. Después de perder la batalla en los tribunales, los creacionistas vuelven a ganar terreno en EEUU con una nueva estrategia: vincular la defensa de sus tesis con la negación del calentamiento global y argumentar que los puntos de vista alternativos, es decir, el creacionismo y el negacionismo climático, deben ser enseñados a los alumnos en igualdad de condiciones con las teorías científicas.

Para ello, poco importa que la Evolución sea uno de los pilares de la Ciencia, ni que la inmensa mayoría de la comunidad científica dé por hecho que se está produciendo un cambio en la temperatura global causada, con toda probabilidad, por la actividad humana.

El último asalto, - lo cuenta Leslie Kofman en The NewYork Times - ha sido el del representante republicano Tim Moore, quien pretende introducir en la legislación de Kentucky una modificación para invitar a los profesores a discutir "las ventajas y desventajas de las teorías científicas", incluyendo "la evolución, los orígenes de la vida, el calentamiento global y la clonación humana". "Nuestros hijos", asegura Moore, "están siendo expuestos a teorías como si fueran hechos".

En Texas, las autoridades educativas pidieron a los docentes el año pasado que presentaran todas las caras del asunto en lo referente a la Evolución y al cambio climático. Hace sólo una semana, el Estado de Dakota del Sur aprobaba una resolución por la que instaba a los profesores a enseñar el cambio climático de "manera equilibrada" y en la que se apelaba a los efectos "astrológicos" sobre el clima o se afirmaban cosas como que "el dióxido de carbono no es un contaminante", sino un "ingrediente altamente beneficioso para la vida de las plantas".

Una puerta trasera

Por supuesto, ni todos los negacionistas rechazan la Evolución ni todos los creacionistas niegan el cambio climático. Se trata más bien de una estrategia de estos últimos para desacreditar a la Ciencia y defender la necesidad, como ellos dicen, de "enseñar la controversia". En otras palabras, de introducir la religión en la clase de Ciencia por la puerta de atrás.

De alguna manera, sostiene el artículo de The New York Times, si los creacionistas consideran que si consiguen que el debate se centre en si el calentamiento global es cierto o no, y lo asocian con sus tesis, aparecerán ante la opinión pública como firmes defensores de la libertad académica en las escuelas.

"Todo esto es un intento de sembrar la duda sobre la veracidad de la Ciencia", asegura Lawrence M. Krauss, físico de la Universidad de Arizona, "y decir esto es solo otro punto de vista, ni mejor ni más válido que el fundamentalismo".

En esta batalla, los creacionistas tienen el apoyo de muchos miembros del Partido Republicano, que tratan de introducir enmiendas en las legislaciones estatales. Por el otro lado, la administración Obama está empeñada en introducir la enseñanza del cambio climático en los colegios y reforzar la educación medioambiental. Con estas cartas encima de la mesa, la lucha por la enseñanza de la Ciencia ya tiene otro frente donde pelear.

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