Unidades de estado sólido para acelerar las prestaciones del sistema

Uno de los componentes que más energía consume en un ordenador es el disco duro, y también es uno de los más expuestos a posibles fallos mecánicos, ya que los cabezales de lectura tienen que permanecer a fracciones de milímetro sobre la superficie de unos discos que giran a varios miles de revoluciones por minuto, por lo que no es de extrañar que en los últimos meses las unidades de estado sólido estén ganando cada vez más popularidad.

Se trata de unas unidades -mal llamadas a menudo discos- en las que el contenido se almacena en memoria RAM, con lo que no hay partes móviles que se puedan estropear y que consumen mucha menos corriente que los discos tradicionales, lo que aún a pesar de su precio todavía más elevado las hace muy adecuadas para su uso en portátiles.

Pero no solo se pueden usar en un ordenador portátil y de hecho Kingston acaba de anunciar su unidad SSDNow V Series de 40 gigas, pensada específicamente para su uso en ordenadores de sobremesa, y en concreto para instalar en ella el sistema operativo y las aplicaciones más importantes, dejando los datos y otras aplicaciones en un disco duro tradicional.

Con esto se consigue que el sistema y las aplicaciones arranquen mucho más rápidamente, y además Kingston ha pensado en la forma de facilitar la tarea al usuario al incluir con la unidad el software necesario para clonar el sistema operativo en ella así como los cables y adaptadores necesarios para su instalación física.

El que solo sea de 40 gigas es debido a la ya citada diferencia de precio entre los discos tradicionales, cada vez menosr, todo sea dicho, con lo que puede que tarde más o menos, pero en mi opinión en pocos años todos los ordenadores, tanto de sobremesa como portátiles, llevarán unidades SSD como forma principal de almacenamiento.