Temporada de transacciones

De Amancio Ortega a Messi, pasando por Riu: los nuevos caseros de hoteles

La pandemia congeló la actividad de los establecimientos hoteleros y dejó margen a empresarios e inversores con grandes bolsillos para entrar en el sector. 

Amancio Ortega
De Amancio Ortega a Messi, pasando por KKR: los nuevos caseros de hoteles.
La Información

Los hoteles cerraron sus puertas en marzo de 2020, pero su vacío no espantó a los inversores. El primer semestre de este año cerró con una inversión hotelera de 1.094 millones de euros, lo que supone uno de los mejores registros trimestrales en los últimos 15 años, según los datos de la consultora Colliers. Entre compras de hoteles existentes, edificios para su reconversión y suelos para desarrollos hoteleros se han cerrado un total 52 operaciones durante un periodo en el que todo parecía perdido. 

La última la protagonizó el grupo mexicano RLH Properties al adquirir el hotel de lujo Bless Collection de Madrid, pero Amancio Ortega lanzó el pistoletazo de salida para esta temporada de compras. El dueño de Inditex sorprendió al mercado en febrero con la adquisición del hotel Senator Playaballena, en Rota, al grupo Senator Hotels & Resorts por 25 millones de euros. La transacción se produjo en un momento de parálisis en el sector que afectó directamente a la valoración de los activos. 

David Paramio, director de la división hotelera de Tinsa, explicó a La Información en su momento que "la crisis de demanda turística ha paralizado todas las actividades económicas dependientes del turismo, lo que ha significado una merma en el valor actual de los hoteles". Amancio Ortega aprovechó estas rebajas y el CEO de Merlin Properties, Ismael Clemente, destacó el valor de esta industria pese a la crisis al comentar a este medio que "si fuera Amancio Ortega compraría hoteles como si no hubiera un mañana".

Messi no quiso quedarse atrás. El futbolista argentino protagonizó la compra del Hotel Casa Canut a través de su empresa MiM Hotels, que comparte con el Majestic Hotel Group (MHG). Con esta operación, la compañía de Messi sumó un quinto hotel a su cartera, y su segunda apuesta por la nieve. El inmueble era propiedad de la familia Canut, que lo administró desde su fundación hace 50 años. Los interesados deberán reservar con más de un mes de antelación y estar dispuestos a pagar 114 euros por noche. 

También ha habido operaciones entre miembros del sector. La empresa hotelera Riu informó en mayo de que adquirirá a TUI el 49% de la propiedad de 19 hoteles que operan bajo la marca RIU Hotels & Resorts, además de dos terrenos con proyectos en desarrollo que están en construcción en México y Senegal, por 670 millones de euros. La cadena aseguró que, tras constatar que el modelo patrimonialista ha resultado una ventaja para afrontar esta crisis, la propiedad total de estos 19 hoteles aporta un extra de agilidad ante los posibles cambios de paradigma del futuro cercano. 

Otra transacción de calado es la que prepara Brookfield. El fondo canadiense ultima la compra de los inmuebles de la cadena Selena por 430 millones de euros. Fuentes del sector aseguran que el vehículo inversor ha iniciado la última fase de la 'due diligencie' con el objetivo de cerrar la operación antes del 31 de julio. El movimiento incluye cinco hoteles que suman más de 2.200 habitaciones. Además, el diario Vozpópuli ha desvelado que el fondo de inversión estadounidense Värde Partners valora la venta del hotel Apolo de Barcelona a su homólogo canadiense Brookfield por 96 millones de euros.

El año ha traído esperanza porque algunos propietarios de inmuebles han conseguido nuevos inquilinos. Silicius Real Estate, por ejemplo, cerró a principios de junio un acuerdo con Barceló Hotel Group para la gestión del hotel situado en el sur de Menorca que adquirió durante el primer trimestre de 2021. Su apertura está prevista para este verano con el nombre Barceló Nura, en referencia a la influencia de los fenicios en la cultura de la isla.

Inversores interesados

Santander Asset Management (AM), la gestora de Banco Santander, puso en marcha un fondo que invertirá en activos hoteleros en el sur de Europa junto a la firma británica Signal Capital Partners durante junio. La entidad bancaria ya ha comprometido 100 millones de euros, que se suman a otros 100 millones aportados por el fondo. El plazo de inversión, orientado a inversores institucionales, será de alrededor de cinco años. El banco explicó en su momento que el vehículo contribuirá a que las cadenas hoteleras puedan captar recursos y disponer de alternativas para recuperarse de la caída de ingresos provocada por la pandemia de coronavirus. 

Hay más activos disponibles...

NH Hotel Group confirmó en junio que se encuentra en negociaciones avanzadas para la venta del hotel NH Collection Barcelona Gran Hotel Calderón por un importe aproximado de 125 millones de euros. La operación se llevaría a cabo mediante la estructura de 'sale and leaseback' para que la cadena pueda mantener sus operaciones en el inmueble. 

Además, este medio desveló que la cadena Meliá finalizó una operación de transmisión de seis hoteles de su propiedad y de su participación sobre otros dos activos en la cartera de la socimi de Bankinter. El acuerdo pasa porque la familia Escarrer mantenga la gestión hotelera de los ocho activos mediante contratos a largo plazo. También se reserva la posibilidad de ejercer futuras opciones de compra sobre los mismos hoteles a precio de mercado, siempre y cuando se cumplan "determinadas condiciones de éxito". El valor total de la transacción asciende a 203,9 millones de euros, justo el objetivo que se marcó Meliá el pasado mes de mayo para paliar los estragos de la pandemia en sus cuentas.

La salud del sector

Los expertos de la consultora Colliers destacan que los inversores internacionales se han volcado con el mercado hotelero porque creen que la industria dedicada al ocio se recuperará mucho antes que la ligada al negocio, y España es uno de los países de máximo potencial. No en vano, aproximadamente el 60% de la inversión en el primer semestre de 2021 se concentró en activos vacacionales, frente al 40% que acaparó el segmento urbano, transaccionándose muchos de estos activos en zonas eminentemente turísticas.

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