PREGUNTA
- Me divorcié hace años y tengo atribuido el uso de la QUE fue nuestra vivienda conyugal junto con mis hijos menores de edad. Tras liquidar nuestra sociedad ganancial, la vivienda quedó en proindiviso entre mi marido y yo y ahora dice que va a pedir la división de la cosa común en el juzgado para que la casa se venda a un tercero ¿Puede hacer eso? ¿Perderíamos mis hijos y yo el uso?
Vamos por partes. El artículo 400 del Código Civil establece que nadie está obligado a permanecer en la indivisión, lo que efectivamente faculta a su expareja a instar el procedimiento judicial de división, tal y como nos indica.
Ahora bien, si su atribución de uso está recogida en sentencia y se encuentra debidamente inscrita en el registro de la propiedad, podrá ser oponible frente a terceros; lo que significa que si la vivienda es objeto de enajenación –ya sea en pública subasta o por otro mecanismo en el seno del proceso de división de cosa común-, quien lo adquiera, habrá de soportar la carga que supone su derecho de uso.
Solo será posible enajenar el inmueble sin dicha carga, si usted así lo consiente expresamente –renunciando en su nombre y en el de sus hijos a la atribución del uso- o si se produce un cambio de circunstancias que conlleve el cese de dicha atribución, como pueda ser la mayoría de edad de sus hijos o su independencia económica.
En este sentido, conviene recordar también la Sentencia del Tribunal Supremo de 29/10/2016, que extingue el uso de la vivienda familiar atribuido a la esposa e hija menor por convivencia en dicho domicilio con una nueva pareja sentimental.
*La respuesta ha sido elaborada por el despacho de abogados Echeandia & Alevito: www.echeandia-alevito.com
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