La ejecución de la venta de la plataforma logística Plaza Zaragoza ha sentado muy bien a los beneficios de Trajano Ibérica. La socimi que cotiza en el BME Growth cerró el primer semestre con 16,2 millones de beneficio neto, un 1.602% más que hace un año, como recoge el documento de información que ha presentado al mercado. Una cifra que se explica con los ingresos de 58 millones de euros por las naves situadas en la capital aragonesa tras una operación que se selló en el mes de abril. Esta desinversión ha ayudado a que la sociedad participada por accionistas VIP como los dueños de Cosentino o los fundadores de Goldcar repartiera dividendos por 32 millones de euros.
Dicha venta es la que ha provocado que ese beneficio se haya incrementado de una manera considerable con respecto a junio de 2020, cuando el mismo fue de tan solo un millón de euros. El EBITDA de la firma especializada en adquisición y promoción de inmuebles para su arrendamiento alcanzó los nueve millones de euros, mientras que la cifra de negocio también ha experimentado un crecimiento, al llegar a los 7,55 millones. El pasivo supera los 130 millones de euros, y la deuda bancaria alcanza los 105,2 millones, debido a los distintos créditos pendientes o la novación de algunos de ellos, como el solicitado para el activo llamado Edificio Echevarría, situado en Bilbao.
Actualmente, la capitalización bursatil de la sociedad, que cuenta con el respaldo de la división de Real Estate de Deutsche Bank, está por encima de los 98,8 millones de euros. La socimi está viviendo un buen 2021, ya que sus acciones se han revalorizado un 2,96% en lo que va de 2021, según los datos del BME Growth. En mayo de 2021 ejecutó un reparto de dividendo a cuenta de 2020 a 1,03 la acción. Algo que complementó solo un mes después, con un importe bruto por título de 0,09 euros.
De esto se beneficiaron las distintas sociedades que tiene como accionistas, entre las que hay perfiles muy conocidos en el mundo empresarial o financiero. Al frente de la misma como presidente está Juan Alcaraz, expresidente y fundador de la empresa de coches sin conductor Goldcar, que está presente en la misma a través de Aligrupo Business Opportunities, S.L, que posee el 10,55% de las acciones. El accionista de referencia de la socimi es Alumbre Inversiones 2014, S.L, una sociedad participada por distintas familias malagueñas vinculadas a los negocios que cuenta con el 13,22% del capital. Entre las dos alcanzan casi el 25% de las participaciones totales.
El resto de accionistas, que rondan el 5%, pertenecen a ámbitos muy diversos. Con el 5,52% está la Corporación Empresarial Holfin, que pertenece a los dueños de la firma de detergentes Persán. El 5,28% está en manos de Falagal Inmuebles, la sociedad de una familia bodeguera valenciana, dueños de Pago Casa Gran. Otra de las presentes es Dogalcar Patrimonio, una firma que posee concesionarios de coches de alta gama en Málaga. Otra de las destacadas es la sociedad de la familia Cosentino, Surister del Arroyo, que mantiene el 5,27 de los títulos. Además, forman parte del accionariado la aseguradora CNP, con el 5,27%, y la ONG Educo, cuya sociedad Fundación Educación y Cooperación mantiene el 3,52%.
Tres activos
La pérdida de Plaza ha dejado a Trajano con tres activos en su cartera con una valoración conjunta de 210 millones de euros. El principal es un centro comercial en Alcalá de Henares (Madrid), llamado Alcalá Magna. Su valor llega a a 105 millones de euros y dispone de una superficie comercial de 34.165 metros cuadrados. Le sigue otro espacio comercial localizado en la localidad portuguesa de Vila Real. La valoración del mismo es de 67,03 millones y su extensión llega a 21.891 metros cuadrados. Por último, la socimi dispone del ya mencionado Edificio Echevarría. Se trata de un inmueble de uso mixto y comercial adquirido en 2015 de 8.927 metros cuadrados. El mercado lo valora en 37,99 millones de euros, según el informe financiero.
El impacto del coronavirus ha ido disipándose con el transcurso del 2021, como señala la firma presidida por Juan Alcaraz. En su caso, habla de niveles "muy elevados" de su tasa de cobro. Aun así, admiten que están analizando "caso a caso" las situaciones en las que se hayan solicitado aplazamientos o aquellas en las que se hayan producido más dificultades por las restricciones de la pandemia. De hecho, el cobro por sus inversiones inmobiliarias llegó a los 55,2 millones de euros en este primer semestre de 2021.
